Comunicado de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).Es bastante probable que el año 2010 figure entre los tres años más cálidos desde que comenzaran los registros climáticos instrumentales en 1850, según las fuentes de datos compiladas por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). La temperatura mundial combinada del aire en la superficie del mar y en la superficie terrestre en 2010 (enero a octubre) se estima actualmente en 0,55 ± 0,11°C1 (0,99 °F ± 0,20 °F) por encima de la media anual de 14,00 °C/57,2 °F correspondiente al período de 1961 a 1990. Por el momento, 2010 se considera como el año más cálido registrado hasta el presente, justo por delante de 1998 (anomalía positiva de +0,53 °C de enero a octubre) y de 2005 (0,52 °C)2. Los datos de reanálisis “ERA-Interim”3 apuntan también a que las temperaturas de enero a octubre de 2010 están muy cerca de alcanzar niveles récord. La clasificación final de 2010 no podrá determinarse claramente hasta principios de 2011, cuando se analicen los datos de noviembre y diciembre. De los datos operativos preliminares, que abarcan del 1 al 25 de noviembre, se desprende que las temperaturas mundiales para ese período de 2010 son similares a las observadas en noviembre de 2005, lo que parece indicar que las temperaturas mundiales para 2010 se aproximarán a niveles récord.
En los diez años transcurridos desde 2001 a 2010, las temperaturas mundiales han superado en 0,46 °C el promedio anual calculado para el período de 1961 a 1990 y en 0,03 °C el promedio para el período de 2000 a 2009, y han alcanzado el valor más alto jamás registrado para un período de diez años. El calentamiento que se ha producido en los últimos tiempos ha sido especialmente acusado en África, en partes de Asia y en algunas zonas del Ártico; en el Sahara y la península Arábiga, en África oriental, en Asia central y en Groenlandia y el Ártico canadiense, entre 2001 y 2010 las temperaturas superaron en 1,2 a 1,4 °C la media a largo plazo y fueron entre 0,7 °C y 0,9 °C más cálidas que en todo el decenio anterior.
Las temperaturas del aire en superficie sobre las zonas terrestres estuvieron por encima de las normales en casi todo el mundo. Las anomalías positivas más extremas ocurrieron en dos regiones principales: la primera abarca gran parte de Canadá y Groenlandia, con temperaturas medias anuales superiores en 3 °C o más a las normales en algunas zonas de Groenlandia occidental y de las regiones ártica y subártica del este de Canadá. La segunda abarca casi toda la mitad norte de África y casi toda Asia meridional, extendiéndose por el este hasta la mitad occidental de China, con unas temperaturas anuales superiores en 1 a 3 °C a las normales en la mayor parte de la región. En muchas partes de ambas regiones se dio el año más cálido jamás registrado, como fue el caso en vastas zonas de África septentrional, la península Arábiga y el suroeste de Asia (donde Turquía y Túnez registraron su año más cálido), así como en gran parte del Ártico canadiense y de la zona costera de Groenlandia. Es muy probable que en cuatro de las cinco subregiones4 que se encuentran total o parcialmente en África (África occidental y meridional, Sahara/península Arábiga y la región del Mediterráneo) se dé el año más cálido jamás registrado, así como en Asia meridional y central, y en Groenlandia y el Ártico canadiense. Las temperaturas medias en Canadá también han sido las más altas jamás registradas.
En 2010 solo en un número reducido de zonas terrestres se dieron temperaturas inferiores a las normales, siendo los casos más destacados los de algunas zonas del oeste y el centro de Siberia en Rusia, zonas del este de América del Sur, el interior de Australia, zonas del norte y el oeste de Europa, el este de China y el sureste de Estados Unidos de América. Fue el año más frío desde 1996 en el norte de Europa y desde 1998 en el norte de Asia, debido principalmente a unas temperaturas invernales inferiores a las normales. Asimismo, es probable que en varios países del norte de Europa se dé el año más frío desde 1996, entre ellos Reino Unido, Alemania, Francia y Noruega.
Las temperaturas de la superficie del mar fueron inferiores a lo normal en casi toda la mitad oriental del océano Pacífico debido a un episodio de La Niña que se formó durante el año, pero fueron muy superiores a lo normal en casi todo el océano Índico y el Atlántico. Las temperaturas en el norte del Atlántico tropical fueron especialmente cálidas y llegaron a alcanzar niveles récord en la mayor parte de la zona situada al este de la longitud 55°W.
Fenómenos climáticos importantes a escala regional en 2010
El monzón de verano causa lluvias extremas en algunas regiones de Asia
En Pakistán se produjeron las peores inundaciones de su historia como consecuencia de unas lluvias monzónicas excepcionalmente intensas. Las principales causantes de las inundaciones fueron las lluvias caídas del 26 al 29 de julio ya que en esos cuatro días las precipitaciones superaron los 300 mm en una vasta zona alrededor de Peshawar, al norte del país. Al sur se produjeron de nuevo lluvias intensas del 2 al 8 de agosto, que agravaron las inundaciones. Más de 1 500 personas perdieron la vida y más de 20 millones de personas resultaron desplazadas al quedar inundadas grandes extensiones de las tierras agrícolas del país. Las Naciones Unidas consideraron que las inundaciones habían provocado la mayor crisis humanitaria de la historia reciente. Las precipitaciones totales caídas durante la estación del monzón en Pakistán fueron las cuartas más elevadas de las que se tienen datos y las más abundantes desde 1994.
Las lluvias estivales también fueron muy superiores a las normales al oeste de India y en China se dieron las peores inundaciones monzónicas desde 1998, que afectaron seriamente al sureste y a algunas zonas del noreste de China. Las inundaciones se extendieron también a la península de Corea. Algunas provocaron un alto número de víctimas en China, donde se perdieron más de 1 400 vidas en la provincia de Gansu, bien causadas directamente por las inundaciones, bien a causa de desprendimientos de tierras. Sin embargo, durante la estación del monzón las precipitaciones medias en India superaron las precipitaciones normales solo en un 2% y fueron muy inferiores a las normales en el noreste de India y Bangladesh, donde se dio la estación del monzón más seca del país desde 1994.
Olas de calor extremas en verano en Rusia y en otras regiones
En el verano del hemisferio norte se produjeron olas de calor excepcionales en varias zonas de Eurasia. El calor más extremo se dio en el oeste de Rusia y duró desde principios de julio a mediados de agosto, aunque las temperaturas eran ya superiores a lo normal desde el mes de mayo. En Moscú las temperaturas medias de julio superaron en 7,6 °C a las normales, por lo que ese mes se convirtió en el más cálido jamás registrado en la ciudad por más de 2 °C y tales anomalías se mantuvieron hasta que las temperaturas bajaron en los últimos diez días de agosto. El 29 de julio se alcanzó una nueva temperatura máxima, de 38,2 °C, y durante 33 días consecutivos las temperaturas fueron de 30 °C o superiores (mientras que, comparativamente, en el verano de 2009 no hubo ningún día con temperaturas superiores a los 30 °C). Ese calor extremo del verano causó alrededor de 11 000 víctimas tan solo en Moscú5. En el centro de la Rusia europea las temperaturas medias superaron en más de 5 °C a las normales durante el verano. El calor trajo consigo destructivos incendios forestales y sequías graves, especialmente en la región del Volga, provocaron malas cosechas generalizadas. Los países vecinos también se vieron afectados y se registraron temperaturas máximas extremas en Finlandia, Ucrania y Belarús, y se alcanzó un número récord de noches extremadamente cálidas en zonas del sureste de Europa, entre ellas Serbia.
El verano también fue extremadamente caluroso en muchas otras zonas de Eurasia y el norte de África. En el extremo oriental de Rusia las temperaturas estuvieron muy por encima de las normales y en la parte occidental del país también se dio un calor extremo, por lo que el verano acabó siendo el más cálido jamás registrado en toda Rusia. Tal fue el caso de Japón y China. En el sur de Asia a principios de año se produjo un calor excepcional antes del monzón, llegándose a alcanzar 53,5 °C en MohenjoDaro (Pakistán) el 26 de mayo, lo que constituyó un récord de temperatura nacional y un récord para Asia, al ser la temperatura más elevada registrada desde, por lo menos, 1942. Un calor extremo afectó al norte de África y de la península Arábiga en varias ocasiones durante el verano, alcanzándose temperaturas de 52,0 °C en Jeddah (Arabia Saudita), de 50,4 °C en Doha (Qatar) y de 47,7 °C en Taroudant (Marruecos).
Condiciones climáticas anormales en el invierno de muchas zonas del hemisferio norte
Durante el invierno del hemisferio norte de 2009/2010 en las latitudes medias el flujo del oeste fue inusualmente débil, lo que trajo consigo numerosas y acusadas anomalías climáticas en varias zonas de ese hemisferio. En particular, fue un invierno bastante crudo en casi toda Europa (excepto en la región del Mediterráneo), la parte asiática de Rusia (excepto en el extremo oriental) y Mongolia. Las anomalías térmicas máximas durante el invierno (por debajo de −4 °C) se dieron en el centro de Rusia pero, desde una perspectiva histórica, las condiciones meteorológicas más inusuales se dieron en la periferia occidental de Europa, y tanto en Irlanda como en Escocia se dio el invierno más frío desde el de 1962/1963. En muchas otras partes del centro y el norte de Europa tuvo lugar también el invierno más frío desde los de 1978/1979, 1986/1987 o 1995/1996, aunque en general las temperaturas no fueron excepcionales si se consideran en un contexto histórico a largo plazo. La falta de los vientos del oeste habituales del invierno también provocó condiciones meteorológicas secas en zonas costeras donde suele haber abundantes precipitaciones, llegando a registrarse el invierno más seco en la historia de Noruega occidental (con unas temperaturas medias inferiores en un 72% a lo normal). Si bien durante prácticamente todo el invierno no soplaron vientos fuertes del oeste, una violenta tormenta (Xynthia) cruzó el noroeste de Europa a finales de febrero, lo que provocó daños generalizados a causa de los vientos y las mareas de tempestad, especialmente en Francia, donde la velocidad del viento superó los 150 km/h en la costa occidental. Más al sur de Europa, el invierno fue muy húmedo y las precipitaciones duplicaron con creces las normales en España, Portugal, Italia y el sureste de Europa.
En el norte de África el invierno fue caluroso. Las temperaturas medias en febrero superaron en 3,7 °C las medias a largo plazo del Sahara y la península Arábiga, tratándose de la mayor anomalía mensual de la que se tengan datos. A finales de febrero las temperaturas alcanzaron entre 30 y 36 °C en el norte de Argelia, a saber, la mayor anomalía positiva para un mes de febrero que se haya registrado desde 1980. Las temperaturas del invierno también estuvieron por encima de lo normal en Turquía y Oriente Medio.
En América del Norte el gradiente norte-sur de la temperatura fue mucho más débil de lo normal. Canadá registró el invierno más cálido de su historia, alcanzando una anomalía positiva de 4,0 °C con respecto a la media a largo plazo en todo el país e, incluso, de 6 °C o más en algunas zonas del norte del país. Se registró también la primavera más cálida, llegando a superarse la media a largo plazo en 4,1 °C). Las anomalías positivas se extendieron hacia el este, hasta el Ártico, llegando hasta Groenlandia y Spitsbergen. En Canadá se registró también el invierno más seco, siendo especialmente inusuales las condiciones meteorológicas secas en la Columbia Británica. A todo ello se sumaron temperaturas excepcionalmente elevadas, lo que provocó escasez de nieve para algunos de los acontecimientos de los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver. Al contrario que en Canadá, en la mayor parte del territorio continental de Estados Unidos (excepto en el extremo noroccidental y nororiental) hizo más frío de lo normal. En todo el país fue el invierno más frío desde el de 1984/1985, y en la mayoría de las regiones del sur, desde Texas hacia el este, el invierno fue uno de los diez más fríos jamás registrados. El frío llegó acompañado de un manto de nieve inusualmente extenso y de nevadas estacionales muy intensas en algunas ciudades del este del país, como en Washington D.C., donde se alcanzó un nivel récord.
Fuertes lluvias e inundaciones
En 2010 cayeron fuertes lluvias en amplias zonas de Indonesia y Australia al producirse un episodio de La Niña, y las lluvias fueron particularmente inusuales a partir del mes de mayo (normalmente la época más seca del año). En Indonesia las precipitaciones mensuales fueron por lo menos el doble de las normales de junio a octubre en la mayor parte de Java, en las islas al este de Java y al sur de Célebes. El período de mayo a octubre fue el más húmedo jamás registrado en el norte de Australia, con unas precipitaciones superiores en un 152% a las normales, mientras que más al sur cayeron lluvias más abundantes de lo normal, que contribuyeron a aliviar la sequía prolongada en algunas zonas del sureste del país. La primavera fue especialmente húmeda y, a nivel nacional, resultó ser la primavera más húmeda jamás registrada.
Si bien las lluvias estacionales no fueron superiores a las normales con la misma persistencia, más al norte, en el sureste de Asia, tanto en Tailandia como en Viet Nam hubo importantes crecidas en octubre, que provocaron cuantiosas pérdidas de vidas humanas y daños económicos.
Muchas otras partes del mundo se vieron afectadas por inundaciones de importancia considerable durante 2010. En el Sahel de África occidental la estación del monzón fue especialmente activa durante el verano y causó inundaciones ocasionales, siendo Benin y Níger los países más gravemente afectados. En Benin la actividad del monzón provocó las peores crecidas registradas hasta el momento en cuanto a sus consecuencias pues causaron pérdidas importantes en el sector de la agricultura y perturbaciones graves de los servicios públicos (quedando interrumpido, por ejemplo, el acceso a los centros de salud) aunque, en general, las precipitaciones no batieron ningún récord de volumen.
En mayo se produjeron graves inundaciones en el centro de Europa, particularmente en el este de Alemania, en Polonia y en Eslovaquia; a finales de junio se produjeron inundaciones en Rumania, Ucrania y Moldova y, más adelante, en Alemania se registró el mes de agosto más húmedo hasta la fecha. En Bursa (Turquía) fue el período de enero a octubre más húmedo registrado hasta el presente (1 152 mm, o sea un porcentaje superior en 132% a lo normal), mientras que la media de las precipitaciones en Rumania para el período de enero a octubre fue superior en un 34% a lo normal y en el norte de Bohemia (República Checa) el volumen de las precipitaciones en 2010 fue el mayor desde 1981.
En América del Sur, en Colombia se dieron las peores inundaciones de noviembre en más de 30 años. Crecidas repentinas más localizadas causaron graves daños y pérdidas de vidas humanas en otros muchos lugares, como en Río de Janeiro (Brasil) en abril, en Madeira (Portugal) en febrero, en Arkansas (Estados Unidos) en junio, y en el sur de Francia, también en junio.
Sequía en el Amazonas y en otras partes
Algunas zonas de la cuenca del Amazonas se vieron gravemente afectadas por la sequía durante la última parte de 2010. Los meses de julio a septiembre fueron tan inusualmente secos en el noroeste de Brasil que provocaron que en muchas partes de la cuenca hidrológica del Amazonas el caudal se redujera enormemente y que el Río Negro, el mayor afluente del Amazonas, descendiera a un nivel jamás registrado. En los meses anteriores, Guyana y las islas orientales del Caribe se vieron gravemente afectadas por la sequía con un nivel de precipitación durante el período de octubre de 2009 a marzo de 2010 que lo sitúan entre el 10 por ciento de los más secos registrados.
En Asia, ciertas zonas del suroeste de China sufrieron una grave sequía a finales de 2009 y principios de 2010. En las provincias de Yunnan y Guizhou se registraron los niveles más bajos de precipitación durante el período de septiembre de 2009 a mediados de marzo de 2010 con unos totales para la mayor parte del área muy por debajo del 30 al 80 por ciento por debajo de lo normal. Esta sequía también trajo consigo temperaturas por encima de lo normal y provocó numerosos incendios forestales. Gracias a las lluvias caídas durante el verano las condiciones mejoraron. Pakistán también sufrió condiciones de sequía a principios de 2010 antes de que comenzara la estación de los monzones. Las lluvias del verano también evitaron la sequía que comenzaba a sentirse en ciertas partes de Europa occidental, como el Reino Unido que entre enero y junio registró su período más seco desde 1929.
Otras regiones del sur de Asia, como el noreste de India, Bangladesh y partes de Tailandia y
Viet Nam experimentaron condiciones relativamente secas durante la principal estación monzónica, pese a que en octubre Tailandia y Viet Nam sufrieron varias crecidas. Aunque se registraron lluvias por encima de lo normal en muchas partes de Australia, lo que suavizó la sequía que venía sufriendo el país desde hacía tiempo, el suroeste fue una clara excepción, ya que entre enero y octubre de 2010 sufrió el período más seco jamás registrado.
El Niño, La Niña y otros condicionantes climáticos a gran escala
A principios de 2010 en el océano Pacífico se podían observar claramente unas condiciones de
El Niño que desaparecieron rápidamente. En esos meses se produjo una rápida transición y para agosto ya se podían observar unas condiciones características de La Niña. En lo que respecta a algunas mediciones, el episodio de La Niña de finales de 2010 es el más claro desde, por lo menos, mediados del decenio de 1970. La respuesta atmosférica ha sido especialmente fuerte, alcanzando el índice de Oscilación Austral su valor mensual más alto desde septiembre de 1973. Esta transición de El Niño a La Niña es similar a la que se produjo en 1998, otro año muy calido, aunque en 2010 los efectos de El Niño fueron más débiles mientras que los de La Niña fueron más fuertes que en 1998.
En la región oriental del océano Índico también se registraron temperaturas considerablemente más cálidas de lo normal durante la segunda mitad de 2010 (Dipolo del Océano Índico negativo), en contraste con el anterior episodio de La Niña de 2007/2008 en que fueron por lo general más frías de lo normal. La oscilación ártica y la oscilación del Atlántico Norte se situaron en una fase negativa durante la mayor parte del año, y de forma excepcional durante el invierno 2009/2010 del hemisferio norte, cuando de acuerdo con la mayoría de indicadores se registraron las oscilaciones ártica y del Atlántico Norte más negativas de la estación. Por su parte, la oscilación antártica (conocida también como Modo Anular del Sur) estuvo en modo positivo durante la mayor parte del año, alcanzando en julio y agosto sus valores mensuales más altos desde 1989.
Actividad ciclónica tropical muy por debajo de lo normal, excepto en el Atlántico norte
La actividad de los ciclones tropicales a escala mundial fue muy inferior a lo normal en 2010, excepto en el norte del Atlántico. Hasta el 30 de noviembre se habían observado 65 ciclones tropicales, de los que 35 alcanzaron una intensidad de huracán/tifón. Ambas cifras son muy inferiores a los promedios a largo plazo de 85 y 44, respectivamente, siendo probable que la cifra total sea al final la más baja desde, por lo menos, 1979.
La actividad de los ciclones tropicales fue especialmente escasa en el norte del océano Pacífico. Solo se produjeron 7 ciclones en el noreste del Pacífico y 14 en el noroeste (los promedios a largo plazo son 17 y 26, respectivamente). Los totales del noreste y el noroeste del Pacífico fueron los más bajos registrados para los meses de enero a noviembre. En cambio, la temporada en el norte del Atlántico fue muy activa, registrándose 19 tormentas con nombre y 12 huracanes, lo que es igual al segundo registro más alto detrás del récord de 15 huracanes establecido en 2005 (los promedios a largo plazo son 10 y 5, respectivamente).
El ciclón tropical más intenso del año, el supertifón Megi, atravesó el norte de Filipinas en octubre tras alcanzar unos niveles de presión central mínimos de 885 hPa, siendo el ciclón tropical más potente del mundo desde 2005 y el más potente del noroeste del Pacifico desde 1984. Aunque Megi provocó daños incalculables en las infraestructuras y la agricultura del norte de Filipinas, Taiwán y la provincia china de Fujian, no causó muchas victimas mortales. La tormenta Tomás (norte del Atlántico, noviembre) alcanzó una intensidad de categoría 2, pero las lluvias que trajo consigo contribuyeron a propagar una epidemia de cólera en Haití.
Regiones polares: tercera extensión más reducida de hielo en verano en el Ártico
En 2010 la extensión del hielo marino en el Ártico fue de nuevo inferior a lo normal. El 19 de septiembre la extensión de hielo marino comprendía únicamente un área de 4,60 millones de kilómetros cuadrados, es decir, la tercera extensión más reducida desde que se obtienen registros por satélite después de las de 2007 y 2008, y más de 2 millones de kilómetros cuadrados por debajo de la media a largo plazo. La congelación de la cubierta de hielo durante el otoño de 2010 fue anormalmente lenta, siendo a partir del 28 de noviembre la más baja de las registradas para la época del año. En el sector canadiense sería la más baja de todas las registradas. Esta situación encajaba con las temperaturas por encima de lo normal que se registraron en la mayor parte del Ártico, donde muchas estaciones de Groenlandia, así como en la región canadiense del Ártico y Groenlandia en general, vivieron su año más calido jamás registrado con unas temperaturas medias anuales de 3 a 4 °C por encima de lo normal.
En cambio, la extensión del hielo marino en la Antártida fue en general superior a lo normal en 2010, registrándose en febrero el promedio mensual más bajo con 3,16 millones de kilómetros cuadrados, 0,22 millones de kilómetros cuadrados por encima de la media a largo plazo. Las temperaturas medias en la región de la Antártida fueron también ligeramente superiores a lo normal.
Origen de los datos utilizados en el presente comunicado
La información preliminar sobre 2010 presentada se ha obtenido a partir de datos climáticos procedentes de redes de estaciones meteorológicas y climáticas de superficie, buques y boyas, así como de satélites. Los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales (SMHN) de los 189 países Miembros de la OMM recogen y distribuyen permanentemente esos datos, para lo que cuentan con la colaboración de varias instituciones de investigación. Esos datos se incorporan continuamente a tres centros mundiales principales de datos climáticos y análisis del clima que crean y mantienen conjuntos de datos climáticos mundiales homogéneos basados en métodos verificados por homólogos. Así pues, el análisis de la temperatura mundial que realiza la OMM se basa en tres conjuntos de datos complementarios. Uno es el conjunto de datos combinados procedente del Centro Hadley de la Oficina Meteorológica del Reino Unido y de la Unidad de Investigación sobre el Clima de la Universidad de East Anglia (Reino Unido). Otro es el conjunto de datos conservado en la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera (NOAA), dependiente del Departamento de Comercio de Estados Unidos de América. El tercero procede del Instituto Goddard de Investigaciones Espaciales de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA). La información preliminar de noviembre de 2010 se ha obtenido del conjunto de datos basados en el reanálisis de ERA-Interim que mantiene el Centro europeo de predicción meteorológica a medio plazo (CEPMMP). La información facilitada por la OMM en el presente comunicado ha sido verificada y revisada por expertos principales de otras instituciones y centros climáticos nacionales, regionales e internacionales antes de darse a conocer.
Las cifras definitivas para 2010 se harán públicas en marzo de 2011 en la Declaración de la OMM sobre el estado del clima mundial que publica anualmente la Organización.
La incertidumbre de ± 0,11 °C se ha calculado únicamente a partir del conjunto de datos HadCRU. Es probable que la incertidumbre para los tres conjuntos de datos combinados sea ligeramente inferior a ésta, pero no se ha cuantificado.
1. Los márgenes de incertidumbre para 2005 y 1998 son de ± 0,10 ºC.
2. El reanálisis de ERA-Interim se realiza en el Centro europeo de predicción meteorológica a medio plazo (CEPMMP),
3. Las subregiones a que se hace alusión en el presente informe son las que define el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en su Tercer Informe de Evaluación (véase: http://www.ipcc.ch/ipccreports/tar/wg1/fig10-1.htm), con algunos nombres regionales ligeramente modificados. Los datos de las anomalías de las temperaturas en las subregiones han sido tomados del conjunto de datos HadCRU.
4. Según un funcionario de salud de la ciudad de Moscú citado por la agencia de noticias France Press (AFP) (http://www.terradaily.com/reports/Russian_heatwave_caused_11000_deaths_in_Moscow_official_999.html)
La Organización Meteorológica Mundial es el portavoz autorizado
de las Naciones Unidas sobre el tiempo, el clima y el agua