Estado autonómico y crisis: mentiras sobre falsedades

 

29/07/2011.El jefe de los empresarios culpa de la crisis a los funcionarios públicos. Intereconomia  a  una coalición  de zapaterista, gay. separatistas vascos y rojos de las Brigadas Internacionales harto de porros. La iglesia, a su vez,   responsabiliza  de la crisis al “hedonismo ateo”. O sea, que si usted no cree en cosas raras  y le atrae más  pasárselo bien que sufrir,  es responsable, entre otras maravillas; de la deuda soberana, las subprimes, la caída imparable del dólar, el endeudamiento yankee o el cambio climático. No falta, por último, quien atribuye la crisis a los judíos, como no; o a sociedades secretas de ricachones que se reúnen en las montañas suizas para joder al mundo.

Todas estas enloquecidas y estúpidas hipótesis no son mucho más ridículas que aquellos que atribuyen la crisis al Estado de las Autonomías. No hay una sóla característica estructural del Estado autonómico (como del federal) del que se deriven ninguna causa, directa o indirecta, inductora de la actual crisis. Ninguna. Todas la causas estructurales de la crisis que están relacionadas con el modelo de explotación y desarrollo económico, son igualmente aplicable a modelos centralistas  o federales.

Suele citarse, por ejemplo, el descontrol del gasto público en las comunidades  autónomas como causa  del  endeudamiento público. El descontrol del gasto público, afecta por igual a la administración central, autonómica o local. Las experiencias de  deuda pública descomunales  en Estados  federales (USA)  o centralistas (Portugal, Irlanda, Grecia) indican claramente la irrelevancia de la descentralización.  El origen del endeudamiento público español  actual es en realidad el endeudamiento  privado (el conocido como “déficit por cuenta corriente”). En plena burbuja especulativa   inmobiliaria  española  de los  años 2003, 2004 o 2005; cuando el Estado español tenía un amplio superavit  fiscal y  de tesorería de la  Seguridad Social, España tenía  uno de los niveles de endeudamiento privado mayores del mundo. La deuda pública  posterior creció como respuestas, muy desafortunada respuesta eso si,  a la explosión de la burbuja especulativo que el endeudamiento privado había provocado.¿Alguien puede explicar cual es la relación causal entre endeudamiento privado y Estado Autonómico, más allá de las políticas realizadas por cada gobierno,  sean estos  gobiernos  centralizados  o autonómicos?

Un caso más, notablemente reciente,  el “gasto farmacéutico público”. Como es bien sabido el “gasto farmacéutico“ es una de las partidas más importantes  del “gasto sanitario”, y este a su vez ,  la partida , junto con Educación, de más peso en el total del gasto público. Los datos publicados en este semana por el Ministerio de Sanidad indican que, sin  menos cabo alguno a  la sanidad pública, se ha logrado, con cambios  legales e institucionales, reducir en más de un 7%  el gasto farmacéutico  en todo el  Estado. Algunas comunidades como Andalucía, que tiene el sistema de salud con más prestaciones y más universal, ha reducido  en más de un 10%. el gasto en farmacia Y para ello no ha habido que recentralizar  nada. Como contra modelo esta el despilfarro, del gasto  público en infraestructuras, especialmente  en la construcción de líneas de  AVE, .competencia del muy centralizado y español Ministerio de Fomento.

La ofensiva contra el Estado de las Autonomías, llevan tiempo fraguándose y no sólo en los sótanos de la FAES o en las tertulias de la caverna mediática.  Grupos mediáticos supuestamente progresistas  y destacados varones del PSOE, entre ellos Alfonso Guerra o Bono, ha alimentado esta asociación entre descentralización y caos. La última patochada del presidente  murciano (PP) de amenazar con devolver  a Madrid,  las competencias en educación y sanidad,  nos indica el verdadero objetivo de esta campaña y que no sólo  es   el Estado  Autonómico sino el Estado de Bienestar mismo. Mentirs sobre  falsedades  el espectro de una nueva derecha tan poco social y democrática como centralista  y neoliberal , avanza.