El gobierno del dinero

 

Cuando no hay dinero público ni para las medicinas, ni para las escuelas, ni para las pensiones, ni para el desempleo; el Estado presta ingentes cantidades de dinero  público a los que teóricamente tienen el dinero (la banca), por qué tampoco tienen dinero. ¿Y para qué? Para que la banca compre la deuda pública  y el Estado pueda obtener dinero para dárselo a la banca. Y en ese juego del   ”yo hago como que te doy y  tú   haces como que me compras”; la banca gana mucho dinero comprando a precio de 1 y  cobrando a precio de 3. Por su parte el Banco central Europeo le da dinero a los bancos privados, avalados por los gobiernos, para que estos compren la  deuda que emiten aquellos que los avalan. Algo así como si yo avalo el crédito de un amigo,  para que con ese crédito se puedan pagar mis deudas, porque estoy en la ruina.  Por último Bankia ( o sea Caja Madrid, la joya de la Corona de Esperanza Aguirre)  necesita con urgencia una inyección financiera (vía aval público) de más de 33000 millones de euros por parte del gobierno. Y ese mismo gobierno  que no tiene dinero para escuelas y hospitales, avala a Bankia. Según el ministro Guindos Bankia es: “una entidad  solvente y saneada”.

Cualquiera que repase este conjunto de secuencias disparatadas  llegaría a la conclusión de que estamos ante una enorme estafa (timo) o ante un macabro y enloquecido juego de Monopoly, con una sola regla: el dinero gana.Para romper este círculo vicioso  y deshacer  la estafa, hay que volver a la política (democracia) y  a una economía social y ecológica  basada  en  las necesidades sociales y los equilibrios metabólicos.  No vivimos bajo la dictadura de los mercados sino del dinero. Por qué el dinero es ya una forma mistificada de dictadura. Hay que quitarle el poder al dinero y esto pasa por quitarle el dinero a los poderosos. La banca pública es hoy más necesaria que nunca. Dinero o democracia, este es el dilema.