A fecha 31 de enero, en Córdoba hemos llegado a la trágica cifra de 48.620 personas en desempleo. Son ya demasiadas personas en situación de desempleo para permanecer inactivos desde la institución local, desde los agentes económicos y sociales, y desde la propia ciudadanía. Siendo ya muy negativo ese dato, añade aún más preocupación que el 48,2% de las personas sin trabajo en la capital cordobesa lo son desde hace más de 12 meses, es decir, de larga duración, indicio de una tendencia muy negativa de evolución de nuestro mercado de trabajo local. Este dato es grave si lo comparamos con el total de población activa de la ciudad de Córdoba, que es de 164.143 personas (la suma de los 115.523 activos laboralmente más los 48.620 que buscan activamente empleo a través de las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo). Recordemos, además, que nuestra ciudad cuenta con una población de derecho de 328.841
Como acabo de exponer, en el pasado mes de enero, en Córdoba hemos llegado a los 48.620 personas en desempleo, de las que el 53,2% son mujeres y el 46,8% son hombres. Por edad, el 48,6% pertenecen al colectivo de entre 25 y 44 años, el 40,6% son mayores de 45 años, y el 10,8% son desempleados menores de 25 años. Además, según la evolución de datos del pasado 2012, en torno al 94% de los nuevos contratos que se firmaron fueron temporales, y más del 70% lo fueron para el sector servicios, fundamentalmente turismo y hostelería, con una economía local excesivamente centrada en este sector de actividad económica.
Con estos datos, la necesidad de un gran acuerdo político, social, económico y asociativo para caminar hacia una solución consensuada para empezar a revertir esta situación es imprescindible. Estamos, sin duda, ante el principal problema social de nuestra ciudad, con consecuencias familiares y sociales cada vez más dramáticas, con incidencia en otras situaciones familiares como la vivienda. Otros debates políticos son cortinas de humo, todos los esfuerzos institucionales y financieros a nivel local han de centrarse en este objetivo.
Como propuesta a corto plazo considero de máximo interés lograr la unidad de ciudadanía, partidos políticos, Administraciones, Universidad, sindicatos, medios de comunicación, colegios profesionales, o colectivos sociales, abandonando estrategias de enfrentamiento: es hora de compartir soluciones. Es una cuestión de confianza colectiva de Córdoba, de generar un espíritu de búsqueda de posibilidades, de remover obstáculos, de mirar hacia el futuro y al bien común.
En ese sentido, considero importante trabajar desde la institución local de nuestra ciudad para conseguir que el mercado de trabajo local sea más transparente, canalizar, hacer la información de interés para el empleo, socializar y democratizar la generación de nuevos empleos, que todas y todos tengan a su disposición las opciones de trabajo que surjan en el ámbito local. En este objetivo, también es crucial la colaboración entre la institución local y la red de entidades que trabajan por la inserción laboral de las personas desempleadas. El trabajo en red en nuestro ámbito local puede generar sin duda eficacia en la solución a este gran problema, y además, este método de actuación supone una concreción del principio democrático en la generación local de empleo.
Como avanzaba anteriormente, dada la grave situación de la ciudad, es hora de definir estrategias conjuntas, de convocar a la sociedad civil a un amplio debate sobre el modelo de desarrollo de futuro. El Ayuntamiento de Córdoba debería ser el principal impulsor de esta estrategia de generación de ideas y propuestas. Sería la generación de un nuevo proyecto de ciudad. Lamentablemente el gobierno local actual de Córdoba se está caracterizando por su falta de iniciativa en políticas locales de empleo, de apoyo a las personas en desempleo, con una estrategia de confrontación con otras administraciones y fuerzas políticas, y con una acción de gobierno centrada en diluir organismos municipales que tendrían como objetivo facilitar el empleo. Es ya hora de actuar, la situación social y económica de la Ciudad de Córdoba exige acciones locales de gobierno claras y comprometidas con el empleo.