Andalucismo en la Andalucía del siglo XXI ( Cuatro constataciones, cinco desafíos y una conclusión) (I)

Jorge López

¿Es posible el Andalucismo en estos momentos en Andalucía?, es una pregunta que se escucha recurrentemente en algunos círculos y ante la que al margen de las respuestas interesadas de unos y otros, existen evidencias que si debemos tener presentes;

 

1. a-     El andalucismo, como todo en el “campus” de la política, será o no será en función de su necesidad. Si se genera demanda, se generara oferta. A lo largo de la historia es una especie de principio básico que siempre suele funcionar antes o después en unos u otros formatos. En ciencia política hablamos de las ventanas de oportunidad. En esta crisis de nuestro sistema político del 78, esta claro que la ventana de oportunidad esta. Pues es la dimensión social y la dimensión territorial, o el desafío social y territorial lo que ha puesto en jaque a este sistema político articulado con nuestra ultima constitución.

b-    El andalucismo tiene historia, tiene bagaje constitucional[1], tiene periodos, y tiene meritos algunos incluso de muy alto alcance, ningún nacionalismo del estado puede aportarlos. De hecho Andalucía consiguió algo insólito en nuestro actual sistema político de la constitución del 78 . Logro que Andalucía se autodeterminara, Logro poner patas arriba todo el diseño de estado unitario, descentralizado pero con inspiración jacobina, que tanto Alfonso Guerra como Abril Martorell escribieron en el articulado de la constitución. Y es en ese pragmatismo del Si se puede, y es en ese ultimo periodo de la historia donde tiene que buscar los cimientos el nuevo andalucismo que podría articularse en el siglo XXI. Y lo que, además, incluso le confiere una “autoridad moral” para efectuar una propuesta que resuelva el desafío independentista catalán.

c-     El andalucismo es social y es territorial. En Andalucía una cosa sin la otra no es posible. Es un sentimiento y un anhelo que será porque vaya ligado a la mejora de las condiciones de vida de su gente. Por eso es eminentemente instrumental y no esencialcita.

d-    El andalucismo es una” energía liberadora pragmática” que no se encuentra en nuestra historia solo en una formación política nacionalista, no es patrimonio de una sola formación política. De hecho tras el 28F y durante el proceso del 4 D del 77 como antecedente a ese referéndum, el partido que mejor supo leer la historia y coger la “bandera andaluza”, fue sin duda alguna el PSOE-A. Figuras como la de Rafael Escuredo primer presidente de la Junta De Andalucía y ultimo presidente de la junta preautonomica andaluza tuvieron mucho que ver con ello. Unido a la constatación de que para ganar Madrid, hay que ganar Andalucía, con todo lo que eso significaba, es lo que hizo al PSOE enarbolar la bandera verde y blanca, símbolo de libertad, solidaridad, democracia y derechos. En ese periodo el papel de la junta preautonomica y la apuesta por la misma de la izquierda andaluza fueron claves, especialmente la apuesta del PCA. Imaginemos aquellos hombres del gobierno preautonomcio reunidos en Antequera, con “cartera ministerial” , si , pero vacía, sin el mas mínimo de los recursos, y que en poco tiempo no solo lograron la autonomía plena para Andalucía, sino que lograron cambiar todo el diseño constitucional autonómico reflejado en la constitución del 78. Que mejor reflejo del “si se puede”, como sentido instrumental del andalucismo de final del siglo XX. Y dicho que el andalucismo no es algo que patrimonialice una sola formación política andalucista, también hay que decir que sin una organización política andalucista de corte progresista (ver constatación anterior), se corre el grave riesgo de que se diluya o incluso se “trasnmute” en lo contrario. Como ahora esta pasando con Susana Diaz y el uso folclórico de símbolos para, justo reivindicar lo contrario; el centralismo y el propio nacionalismo Españolista. O más preocupante lo que pasa a su izquierda con podemos, que al no tener un actor político andaluz con el que poder realizar una confluencia real, no logra dar el salto cualitativo y cuantitativo necesario, ni en el estado, ni en Andalucía. A diferencia de lo que pasa en el eje mediterráneo, con Valencia o sobre todo con Cataluña, donde si existe esa realidad, y confiere a podemos y sus confluencias el primer o segundo puesto en opciones electorales.

Ahora vayamos a los desafíos:

Primer Desafío, respuesta del Andalucismo y Andalucía al contexto internacional actual de final de la globalización tal y como se desarrollo.La crisis esta provocando cambios sustantivos en el contexto internacional y en Europa. El viento corre favorable a populismos, en el sentido de que los sentimientos y la racionalidad de las personas votantes se desequilibran a favor de los sentimientos aun más de lo que se da en términos normales. La desigualdad creciente[2], la congelación de salariaos de la clase trabajadora durante décadas, la perdida de poder adquisitivo de pensionistas, el deterioro de los servicios públicos, el incremento del desempleo, los efectos de los escenarios bélicos creados desde EEUU y sus aliados o por Alemania y sus intereses financieros o por Francia o Rusia y los efectos en las migraciones producidas entre el sur y el norte. Están provocando un efecto repliegue y un rechazo al Establishment (la casta que se decía en el origen de podemos) [3] por parte de sus poblaciones que mas padecieron las consecuencias de esas políticas. Poblaciones que ven a sus “elites” políticas como responsables directos de su situación. Y votan para echarlos del poder, con esa finalidad principalmente. En EEUU hemos visto como esa situación ha generado dos acontecimientos de enorme valor político ; la campaña y los resultados en las primarias del partido demócrata con la irrupción del candidato Sanders con opciones reales de vencer a Hillary Clinton o la victoria final de Donal Trump tras arrasar en sus primarias en el partido republicano. Es mas muchos pensadores ya advirtieron que solo un candidato como Trump en la fase final como candidato demócrata podría ganar a Trump[4]. Iniciamos el 2017 un nuevo ciclo con este presidente en la primera potencia mundial.

Esa situación obligará a Europa a redefinir su estrategia y a repensar incluso su política económica y de defensa como primeras medidas

Eso después de lo que ha pasado con Gran Bretaña y su salida de la UE, o el auge de opciones políticas de corte populista vinculado con movimientos neofascistas , como es el caso de Le pen en Francia o de la candidata del AfD, Frauke Petri de Alemania[5]. Ambos países tienen inminentes elecciones en el próximo año. O la caída del gobierno de Renzi o el ascenso del movimiento 5 estrellas en Italia o el propio auge de podemos en España, en medio de una crisis profunda de la socialdemocracia en estos países.

Inauguramos una fase que se podría definir como fase “proteccionista identitaria”. Donde se caracteriza por :

1-    Reinvidicar el valor de lo propio y el sentimiento nacional y de la patria, y ser mas proteccionista en lo económico. Incluso reivindicar los estímulos directos del estado para la generación de empleo y por supuesto poner más impedimentos a la circulación de personas y blindarse ante la llegada de personas refugiadas o  inmigrantes económicos provenientes de África, de Méjico o de Latinoamérica en EEUU.

2-    Se diluyen algunos rasgos entre la concepción tradicional de derecha y la izquierda, apareciendo ese nuevo concepto analítico de los de abajo y los de arriba. Los que padecen las políticas y los que las deciden y ejecutan. A ver si las ultimas propuestas de J.Corby en Inglaterra en relación a limitar la libre circulación de trabajadores de la UE son muy de izquierdas, o las propuestas de D.Trump sobre crear estímulos directos a la creación de empleo desde el estado son muy derechas . Tal y como últimamente se concebían.

En este contexto Andalucía es clave no solo en la solución del desafío independentista catalán, sino es clave en la viabilidad del mantenimiento de la actual política económica de la UE. O alguien piensa que el adelanto de las elecciones andaluzas y la ruptura de un gobierno de progreso , para abrazar el “experimento” nuevo del partido Ciudadanos , fue casual, o que la ruptura venia determinado solo por llevarse bien o mal Susana Diaz y Maillo o Diego Valderas?. Teníamos un antecedente peligroso en Grecia con un gobierno contra recortes y la troica, teníamos elecciones en Portugal (que por cierto a su gobierno de progreso le están hostigando desde el Banco Central Europeo desprotegiendo la compra de sus bonos), y en España Podemos era en febrero del 2015 la primera fuerza en intención directa de voto en el estado.

En ese contexto, este es el primer desafío: cómo desde Andalucía, el andalucismo aborda política, económica, social y ambientalmente este nuevo escenario internacional, para anticiparse a el y estar preparado y a la ofensiva.

[1] Pérez Trujillano, Rubén. Soberanía en la Andalucía del siglo XIX . Constitución de Antequera y el Andalucismo histórico. Atrápasenos 2015

[2] Esta semana hemos conocido como España es el pais donde mas crecieron las desigualdades , el pais donde las  tres personas  mas ricas ( dos de ellas de la misma familia) tienen la misma riqueza que 14 millones de personas mas pobres. Informe desigualdad de Oxfam publicado en enero de 2017.

[3] Owes Jones , “ EL ESTABLISHMENT: LA CASTA AL DESNUDO, Barcelona  2015 Seix barral

[4] Navarro, Vicens, articulo en publico el día 16 de mayo de 2016 http://www.vnavarro.org/?p=13312&lang=CA

[5] Ver http://www.elconfidencial.com/mundo/2016-05-21/quien-es-quien-extrema-derecha-europa_1203543/