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3. CAMBIOS EN LA TASA DE GANANCIA

Rafa Rodríguez

1.- Introducción

Cada etapa en el capitalismo se define por la estrategia global hegemónica para la reproducción y acumulación[1] del capital: liberal desde los inicios a 1914; el periodo de crisis entre (1914 y 1950) con la gran crisis del 29, la emergencia del  fascismo, las guerras mundiales y las revoluciones socialistas; la etapa de capitalismo keynesiano tras la plasmación de los acuerdos de Bretton Wood (entre 1950 y 1971); y la etapa de la globalización neoliberal entre 1971 (tras el desmantelamiento del sistema de Bretton Wood)  y la crisis del 2008. Desde el 2008 hasta la actualidad vivimos un nuevo periodo de crisis, prolongada y profunda.

En especial, durante la globalización las oligarquías económicas compartieron un proyecto político que las cohesionó con “el surgimiento de una clase capitalista transnacional»[2].

2.- La crisis de la globalización que comenzó en 2008 está caracterizada por los cambios en la tasa de ganancia

Esta larga crisis desde la constatación del fracaso de la globalización se caracteriza por los cambios en la tasa de ganancia.

Si el capital es la “constitución económica” de nuestra sociedad, la apropiación privada de la ganancia es el motor del capitalismo, que permite la acumulación ilimitada de capital.

En el siguiente artículo a este analizaremos con más detenimiento los conceptos y factores que están poniendo en crisis los beneficios empresariales de las grandes corporaciones industriales y la reproducción del capital (tasa de ganancia; tasa neta de ganancia y tasa neta disponible de ganancia). En este, intentamos exponer las consecuencias de los cambios en la tasa de ganancia durante esta crisis.

3.- Los problemas de la tasa de ganancia en la crisis de la globalización

La crisis de la globalización ha implicado cambios en distintos factores que, en su conjunto, suponen una amenaza para la tasa de ganancia que afecta a la reproducción del capital, la reorganización del poder económico de las oligarquías, las consecuencias sociales y en su proyecto político. Los cambios en la tasa de ganancia y sus consecuencias se caracterizan por:

  • Tendencia a la baja de la tasa de ganancia global.
  • Competencia intracapitalista entre el sector manufacturero, el financiero y el tecnológico, con ventaja para estos dos últimos y concentración y transversalidad entre sectores.
  • Presión social y política para compensar la baja de la tasa de ganancia global.
  • Bajas expectativas de compatibilizar capitalismo y democracia.

4.- Tendencia a la baja de la tasa de ganancia global

Hay un cambio decisivo en dos factores que hasta ahora constituían aportaciones gratuitas, mediante procesos extraeconómicos, al sistema de mercancías en el circuito del capital[3]. Hay una tendencia irreversible a la desaparición de los servicios gratuitos de la naturaleza y del trabajo no retribuido, que es desempeñado en su gran mayoría por las mujeres.

El acortamiento de las cadenas globales de valor (CGV), en un contexto tendencialmente inflacionista, y el bajo crecimiento, también han afectado a la tasa de ganancia global.

A ello se suma la incertidumbre sobre las expectativas, en un contexto de aumento de las temperaturas por encima de 1,5º, donde urge abandonar los combustibles fósiles que está dejando obsoleta gran parte de la base manufacturera, por lo que se necesita una cantidad ingente de inversión para su reconversión.

5.- Competencia intracapitalista

La revolución tecnológica, que se ha acelerado durante la crisis, ha colocado a las grandes compañías tecnológicas en una posición de liderazgo que se suma a la tradicional rivalidad intracapitalista entre el sector productivo y el sector financiero. Las multinacionales digitales han logrado una posición de poder que les permite drenar beneficios del sector manufacturero.

6.- La presión social

Los cambios en la tasa de ganancia están provocando que las oligarquías económicas redoblen la dureza en la presión sobre los demás factores para asegurar el crecimiento continuo del beneficio. En especial sobre:

  • los salarios y condiciones de trabajo,
  • la mercantilización de nuevos sectores públicos o comunitarios ante la imposibilidad de ampliar la expansión territorial del mercado,
  • la polarización y centralización territorial,
  • la explotación de recursos y personas en Estados vulnerables.

7.- La presión sobre los Estados

En esta crisis los Estados democráticos necesitan incrementar sus ingresos para hacer frente a la desigualdad creciente y a los efectos del cambio climático, lograr la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y reducir el consumo de energía y materiales, con equidad, para mantener los consensos sociales necesarios para la confianza en las instituciones.

Al mismo tiempo, las oligarquías presionan para no pagar impuestos mediante chantaje a los gobiernos, apoyo a gobiernos vicarios y paraísos fiscales, ya que los impuestos son el factor clave en la tasa neta de ganancia disponible (el beneficio real), como veremos en el siguiente artículo.

8.- Las consecuencias políticas

A las oligarquías económicas le resulta difícil cohesionarse para volver a poner en marcha un nuevo ciclo de acumulación de capital que sea compatible con generar consensos intracapitalistas y sociales basados en:

  • garantizar unas bases suficientes de igualdad,
  • mantener unos niveles de vida aceptables para el conjunto de la población,
  • en entornos democráticos.

Por eso una parte importante de las oligarquías económicas, incluidas muchas de las grandes tecnológicas, están optando por el fin de la democracia, incluso en los Estados del centro del sistema, comenzando por EE.UU., aunque tengan que prescindir de la “población sobrante[4]”.

No tienen expectativas de una nueva hegemonía con las reglas democráticas, para instaurar un modelo estable de acumulación que, al mismo tiempo, le proporcione una mayoría de adhesión social. Esta vez no es suficiente con modificar la subjetividad colectiva porque la crisis ecológica tiene una dimensión objetiva, por lo que democracia global y capitalismo global no son compatibles.

 

(*) La imagen corresponde a una obra de Jean-Michel Basquiat

 

[1] “La acumulación, es decir, la formación de capital adicional, y todo capital adicional pone en movimiento trabajo adicional y produce plusvalía adicional”. El Capital. Carlos Marx. Libro III. Capítulo 13.

[2] Robinson, W. I. Una teoría sobre el capitalismo global: producción, clase y Estado en un mundo transnacional. Siglo XXI Editores. 2013.

[3] Moore, J.W. El capitalismo en la trama de la vida. Traficantes de sueños. 2020.

[4] “la parte de la población que ha dejado de rendir plusvalía en forma directa para el capital en condiciones de productividad media del trabajo mundial.” Eduardo Sartelli: La rebelión mundial de la población sobrante:  Proletarización, “globalización” y lucha de clases en el siglo XXI. Razón y Revolución.

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