Rafel Mendez .El Pais. 15/10/2010.
El dragado del canal de navegación del Guadalquivir hasta los ocho metros de profundidad afectaría negativamente a «la dinámica, la morfología y la biodiversidad» del estuario, que engloba al Parque Nacional de Doñana. Así lo establece el informe científico encargado para decidir sobre el proyecto del Puerto de Sevilla. El mismo informe, que ayer debatieron en Sevilla los miembros de la comisión Doñana 2005, avisa también de que el aumento de los arrozales es incompatible con la conservación del estuario. El documento debe servir de base para que el Ministerio de Medio Ambiente decida sobre la ampliación del puerto y por sus duras conclusiones supone un freno muy importante para el proyecto.
El documento, de más de 1.000 páginas pero con un resumen de 29 al que tuvo acceso este diario, no pretende resolver si es viable o no la ampliación del canal desde los 6,5 metros actuales a los ocho, sino servir de base a la comisión Doñana 2005 eleve una propuesta al ministerio. Pero como afirmó ayer un miembro de esa comisión (en la que hay científicos, administraciones, arroceros y ecologistas) la conclusión es «que en la situación actual no se puede plantear la profundización del dragado».
El puerto justificó que la ampliación permitiría la llegada de buques de hasta 212 metros de eslora y 30 de manga. Aunque en 2003 fue aprobada la Declaración de Impacto Ambiental favorable, en 2007 el Gobierno encargó el estudio para dar el visto bueno final.
Mantenimiento
El texto destaca que la presión sobre el estuario ya es excesiva, ya que las máximas demandas de agua son incompatibles entre sí y con el mantenimiento del estuario. Pero añade que el dragado del río empeoraría la situación: «La dinámica mareal no es capaz de mantener el calado menos seis, por lo que tendrá menos capacidad de hacerlo con el menos ocho y será necesario realizar labores de mantenimiento».
El dragado no es la única amenaza. «Una ampliación de la superficie del arrozal conlleva el incremento de la demanda de agua dulce, lo cual, si se extrae del caudal circulante por el estuario, reduce aún más la biodiversidad del sistema», concluye el texto, que entre los planes propuestos solo considera positiva «la reinundación de llanos mareales en el entorno del parque natural».