Hace más de dos años escribí en esta columna que alcanzaríamos los cuatro millones de parados. Pocos me creyeron. Y menos reaccionaron. Ahora digo que en breve llegaremos a los cinco. Quizá algunos me crean. Pero dudo que reaccionen. Sangran las estadísticas. Colas en los comedores sociales. En las oficinas de empleo. Desahucios. Quiebran las constructoras. Autónomos. Ayuntamientos. Las calles se vacían de noche. Hace frío fuera y dentro de las casas. En los bolsillos. Menos mal que nada importa porque el lunes dan el clásico por televisión. Este dramático inmovilismo demuestra que los mecanismos para el control de masas funcionan infinitamente mejor que los cargos políticos para generar empleo. Y confirma que nuestra democracia enferma. De ignorancia y desidia. Con la complicidad de víctimas y verdugos.
Coincido con Alain Touraine en el agotamiento de este proceso antidemocrático de alejamiento y sustracción pública de la política y la economía. El ciudadano no la entiende. Y no cree ni siente que pueda influir en la toma de decisiones claves en su rutina vital. Muy pocos sabrían explicar con certeza las causas del rescate financiero de Grecia. Tampoco las razones últimas de la gravísima situación económica que ha mandado a la mierda el milagro irlandés. O el portugués. O el español. Por qué inyectan liquidez en Estados Unidos y China. Por qué no lo hace Europa. Qué pintamos nosotros en medio de este diluvio de datos macroeconómicos. Todo es demasiado complejo. Y preferimos huir. Delegar en los políticos profesionales. Que tampoco entienden el porqué de las cosas y se limitan a levantar el dedo cuando se lo ordenan.
Yo denuncio a quienes no denuncian esta situación. A los intelectuales que militan en la afiliación negativa y critican al opuesto sin afirmar su pertenencia. A los medios de comunicación de masas que se limitan a cumplir con la cuota electoral. Y especialmente, a ti. Que picas. Y has creído que nadie habita en los márgenes. Que no hay más realidad que la publicada. Y que terminarás votando a los causantes de la situación. O, lo que es peor, no votando. Soy y seré un firme defensor de la abstención crítica desde el activismo. Pero considero que la disidencia digital o con los brazos cruzados es el peor de los males. Porque consolida el aparente bipartidismo con un raquítico respaldo electoral. Ya está bien de caretas. El Partido Popular ha conseguido integrar en sus filas a demócratas-cristianos, liberales, conservadores, nacional-católicos, desencantados… El PSOE es una amalgama grumosa de una izquierda formal definida por antagonismo al PP. Y los demás han hecho puñales de sus diferencias porque cada vez hay menos empleos y subvenciones que repartir.
En los albores democráticos, la gente sabía que la verdad habitaba en la clandestinidad y la mentira en la propaganda. Hoy sólo existe la propaganda. La clandestinidad se camufla en el inmenso ruido de fondo de la red. Por eso invito a la rebelión pacífica de la clandestinidad ahora que la propaganda se inunda de ultraderecha y más de lo mismo. Para curar esta democracia. Nos va la vida en ello.
Artículo publicado en El Día de Córdoba
Ay, si lo supiéramos, Carlos. Por lo pronto, «reconquistando» parcelas de democracia hurtadas a la ciudadanía y no desangrando más a las opciones ideológicas que nos son más afines. No importa el éxito o el fracaso convencional, sino la coherencia en el viaje.
Me parece uno de los mejores artículos escritos por este autor. Compagina fondo con forma, tiene calidad literaria y lenguaje poético en tema tan dramático. Y no obstante, constituye un aldabonazo en los que «pinchamos».
Es digno de figurar en los mejores diarios de este país si aceptaran la independencia, libertad y ausencia de vasallaje.
Me recuerda a eso de: «Mira lector, aunque no te conozco, te quiero tanto lector que si pudiera..te abriría el pecho…te rasgaría una llaga y te pondría vinagre y sal para que no pudieses descansar nunca y vivieras en perpetua zozobra».
No es la democracia que estuvimos luchando muchas personas, hombres y mujeres en esta España de los cuales quedarón muchos en el camino.
Se me da la cosa que viviendo en un pueblo de Córdoba, no hay ni una persona, que se manifiesta contrario a la que dice los cuatro gelifaldes que estan en la Ayuntamiento, además todos juntos IU.PA.PP.PSOE. cojiditos de la mano, es un pueblo minero, del plan Miner han entrado en 12 años más de 15.000 Millones de las antiguas pesetas.
ATENCIÓN: Se han perdido más de 40 puestos de trabajo y con este dinero que entró no se ha creado ni un puesto de trabajo.
Que importa Endesa, que es la compañia que ha comprado la empresa que revendía la lúz en el pueblo, hace dos sábados se dijo de hacer una concentración en las puertas del Ayuntamiento y de 3.500 habitantes solo aparecio a las 12 de la mañana este que os escribe.
Dime Antonio Manuel como levantamos Andalucía y sacamos a estos políticos que desangrán a los pueblos.
¿Ahora tb censuráis, como en el franquismo? Es la constatación final de que el asqueroso tsunami de votos pepero es inevitable.
Luego no os hagais LOS SUECOS, decid: «pusimos nuestro grano de arena para apuntalar el fascismo».
No os quejéis por tanto.
¿»Curar esta democracia»…? Espera, hermano, que te envío un facultativo con experiencia a ver si estamos hablando de «enfermo» o directa y claramente de ZOMBI:
http://www.youtube.com/watch?v=CqOzsUNLemE
http://www.youtube.com/watch?v=0sgVHNnoZYM&feature=related