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Adiós muchachos

Los paralelos no contienen el centro del mundo sino sus interminables periferias, no equiparan sino que diferencian.  Un grupo de andaluzas y andaluces han decidido comenzar a trazar los paralelos ideológicos que nos definen y nos difuminan, que nos separan y nos unen. Lo escribía José Luis Serrano en un artículo publicado en Granada en diciembre de 2008.

Eso quisimos hacer: un grupo plural con diferentes señas ideológicas y con la voluntad de interpretar la realidad desde nuestro lugar en la periferia del mundo. Conocer la realidad para cambiarla. Con mirada andaluza. El momento era propicio porque era difícil: la crisis ya era una realidad amenazante, pero aún innombrable  en la primavera de 2008, con Zapatero recién investido en su segundo gobierno. Todo el mundo hablaba de una época de cambios. Nosotros entendimos que se trataba de un cambio de época.

Fuimos tres tribus queriendo construir una polis. De esa diversidad y de esa voluntad, nació una experiencia hermosa y útil. Un espacio de encuentro y convergencia ideológica, de aprendizaje y de respeto entre diferentes inédito hasta entonces en el escenario  andaluz donde todo había sido confrontación estéril desde el retorno de la democracia. Un laboratorio donde políticos y políticas con bagaje partidario y sin él nos mezclamos con ciudadanos con ideología y sin partido.

Concha Caballero explicaba en 2008 que Paralelo 36 nacía para ser una respuesta política atrevida, audaz y nueva en Andalucía, un foro de encuentro con los movimientos sociales y una respuesta al bipartidismo ramplón y machista.  

Siempre hemos sido más energía que forma. Nuestro proyecto se basaba en la confianza, incluso en las discrepancias, y en la lealtad con las ideas que nos impulsaban y el espacio que compartíamos. Nunca nos atuvimos a formas asociativas tradicionales más que para solicitar el uso de algún espacio público donde celebrar algún acto. Siempre practicamos la radical democracia. Los intereses particulares eran insignificantes. La generosidad y la capacidad de consenso eran tales que los acuerdos nacían siempre después de debates ricos, intensos, multidisciplinares.

El resultado ha sido fecundo: la revista política digital más veterana de la historia de Andalucía (www.paralelo36andalucia.org) con miles de artículos durante estos diez años, seminarios,  foros de debate, jornadas, publicaciones diversas, programas de televisión…. Paralelo 36 ha sido un medio de comunicación plural, nunca el órgano de comunicación de ningún partido.

El trayecto no siempre ha sido fácil. Después de un comienzo brillante el tiempo y las tensiones electorales nos fueron desgastando. Hubo algún momento de declive. Y también de renacimiento, porque otras personas vinieron a sumarse en 2015 y su entrada supuso una revitalización, un enriquecimiento y un fortalecimiento de nuestro empeño.

También hubo algunas cosas que no salieron bien: la confluencia ideológica fue posible y todos nos contaminamos de feminismo, ecología política, andalucismo, compromiso social, izquierda… La confluencia electoral y política no supimos hacerla, o no pudimos, o tal vez no era el momento. Pero creamos Paralelo 36 para que ocurriera. Por eso a la mayoría de nosotros nos alegra ver que ahora otras y otros dirigentes políticos están manos a la obra trabajando en un proyecto común atrevido, audaz, plural, social, de izquierda, andalucista y feminista para Andalucía. Una alternativa con capacidad real para que el pueblo andaluz pueda elegir políticas diferentes al neoliberalismo después de casi 40 años.

No todos los miembros de Paralelo 36 lo entienden así. El intento de burocratización de nuestro espacio común, su asimilación ideológica con la socialdemocracia española y la utilización de la parte colectiva del blog  para la difusión de ideas particulares, achican y modifican tanto la idea que nació bajo la estrella polar que las personas firmantes hemos decidido soltar amarras.

No nos reconocemos en este corsé en el que no cabe la discrepancia ni la alegría. En el que no hay ni siquiera la posibilidad de reunirnos y hablar sin apelar a la burocracia. Adiós muchachos.

Con deseos de salud y suerte para todos, nos despedimos en busca de nuevos caminos que no conduzcan al centro del mundo. Atrevidos, audaces. Adelante.

 

Firmantes:

Blanca Parrilla Muñoz

Francisco Garrido Peña

Eugenia Gil García

Manuel González de Molina

Mario Ortega Rodríguez

Manuel Machuca

David Soto

Antonio Manuel Rodríguez

Antonia Agudo

Julián Álvarez

Juan Manuel Sanz

Raúl Solís

David Cabello

Pilar González

 

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