22/07/2011.En la costas de Cádiz un conjunto de alcaldes, adictos al ladrillo, llevan frenando durante cerca de diez años diversos proyectos de parques eólicos marinos. Estos parques, en su totalidad, podrían suponer una potencia instalada de más 2.000 MW de energía renovable ( el equivalente de cinco Garoñas), una oportunidad de empleo formidable, un núcleo de vanguardia en I+D+I y el despegue de un nuevo y sostenible sector industrial andaluz. Pero los alcaldes no se han enterado de que el “sueño” ( la pesadilla) del ladrillo se acabó y que de aquellos polvos (especulación urbanística) vienen estos lodos (crisis).
En este no tan extraño “consenso siciliano” se unen alcaldes de IU, del PP y del PSOE. Las asociaciones de empresarios y sindicatos de la zona , con la tradicional visión de futuro que les caracteriza, se oponen también al desarrollo de la energía eólica marina. De nada parece haber servido que la vieja propuesta ecologista de reconversión ecológica de los astilleros en fabricantes de tecnología eólica, sea ya la única alternativa real de supervivencia en la industrialmente desertizada bahía de Cádiz. Ellos a lo suyo: la mentira,. la manipulación , la demagógica.
En un editorial anterior decíamos que Andalucía necesitaba una nueva industrialización. Y situábamos el desarrollo de las energías renovables como el motor de este proyecto. Los parques eólicos marinos son una de las turbinas más potentes de ese motor verde de cambio y autonomía económica. Oponerse ciegamente y de manera irracional a los parques eólicos marinos, es oponerse al desarrollo de Andalucía. Nuestra tierra, como el resto de la humanidad, tiene en estos momentos de crisis metabólica el imperativo de poner en marcha una transición tecnológica hacia una economía solar 100 % renovable. Piensen detenidamente estos alcaldes, y sus partidos, si no los vendría bien acertar alguna vez .
Siento informarle que esta usted muy mal informada. Las personas que componemos Paralelo36 tenemos una larga trayectoria ecologista y conocemos cuales son los impacto de los parques eólicos marinos. Los verdaderos problemas de estos pueblos del litoral gaditano y andaluz son los problemas que hay ahora mismo, sin que exista parque eólico marino alguno, y son el ladrillazo y el desempleo producto de la falta de una política económica endógena y sostenible. Los parques eólicos marinos propuestos tienen una aplicación con un nivel de impacto ambiental muy pequeño y en todo caso claramente compensable con relación a los beneficios ambientales (energéticos, cambio climático, contaminación) que comportan. El problema del atún rojo no tiene nada que ver con los parques eólicos sino con la sobre explotación pesquera y el deterioro de los mares por contaminación y destrucción del litoral, esto mismo es aplicable al resto de especies. En lo tocante a las aves migratorias, el asunto esta ya mas que resuelto desde el informe Leukona; se pueden, y se toman medias, para reducir al máximo este impacto, no siendo finalmente significativo en cuanto afectación a la biodiversidad. Greenpecae, Oceana, Ecolgistas en Acción, la comunidad científica ( La universidad de Cádiz y de Málaga , por ejemplo) ha puesto objeciones al desarrollo de estos parques eólicos marinos. ¿Qué ocurre que ahoar los únicos ecologistas que quedan son los alcaldes de Barbate, Conil, Sanlucar o Vejer ?. Por cierto el mismo alcalde que quiere urbanizar la playa del Palmar esta muy preocupado por la “avifauna del estrecho.
me parece que para opinar al cien por cien antes nos debemos informar, soy de un pueblo de costa de la Janda y estos parques eolicos se cargarian nuestro litoral, la fauna que que atraviesa el estrecho camino de doñana, las rutas del atún rojo, porque no os informais de la defensa de las milenarias almadrabas que no se defienden debidamente en europa, y se meten en el mismo saco de los cerqueros, con los puestos de trabajo y riqueza que aportan a la zona?… es facil opinar sin conocer, sin ser afectados, la reindustrialización de la bahia debe pasar por buenas gestiones y no por tiene que subirse un sector en detrimento de afectar a pueblos, el tema del ladrillo es otra cosa, no mezclemos