Rafa Rodríguez
Introducción
En la caja de herramientas conceptuales que nos ayudan a comprender la dinámica social tienen especial importancia los conceptos de bloque social, espacio político y partido. Son conceptos muy relacionados e imprescindibles para la intervención en el ámbito democrático, ya que a través de ellos es posible organizar las diferentes capas de la dinámica política que, sin sus filtros, se nos presenta como caótica.
La complejidad de la nueva época se manifiesta en una multitud de percepciones de desigualdad, discriminación y opresión, que dan como respuesta una enorme pluralidad de sujetos y culturas políticas entre los que, sin embargo, hay estructuras relacionales aunque no estén formalizadas, ya que la raíz del problema es común.
La política democrática de transformación tiene el reto de sumar mayorías desde la pluralidad, avanzando en una perspectiva de cambio, para lo que es necesario conjugar el pluralismo con la cooperación.
Los conceptos de bloque, espacio y partido describen realidades políticas que no tienen perfiles definidos sino que se superponen en muchos aspectos porque son muy dinámicos. Sin embargo a efectos analíticos lo vamos a describir como procesos diferenciados.
- Bloque social
El concepto de bloque social es el concepto más amplio ya que no sólo es un concepto político sino que va más allá porque es un sujeto cultural, antropológico o, dicho con otras palabras, es el sujeto político de onda larga.
El bloque representa los valores de un conjunto de clases sociales polarizado en torno a la capacidad efectiva de poder, el bloque de las clases privilegiadas y de las subalternas. Es el sujeto de confrontación entre sistemas de valores, que se corresponde con la matriz de la desigualdad que genera el conflicto social.
La funcionalidad del bloque es convertir el proyecto social de un conjunto de clases en el proyecto social de la mayoría, es decir, en conseguir la hegemonía social. Los bloques sociales participan tanto de la pugna por determinar los consensos básicos cómo por determinar el conflicto y la agenda política.
Existe un bloque social porque existe una base común de símbolos, agenda, lenguaje y horizonte que los actores políticos comparten de forma implícita entre ellos y con los intelectuales y creadores de opinión. Un bloque social a diferencia de una alianza, no es una suma sino una multiplicación: el todo es más que la suma de las partes, ensanchando sus fronteras.
El bloque está formado por multitud de organizaciones políticas, sindicales y sociales y asociaciones de todo tipo, con conexiones con líderes de opinión, medios de comunicación, grupos de redes sociales, educadores, artistas, etc. No es un ente sino una estructura informal, un fluido sin fronteras delimitadas. Sus componentes no coinciden en su totalidad con el sistema de valores canónico porque entre ellos también hay una pugna en sus diferentes espacios por la influencia, el liderazgo y la dirección.
- Espacio político
El espacio, en cambio, tiene una naturaleza netamente política. Es la construcción de un ámbito de autonomía en el imaginario colectivo, dentro de un bloque social, mediante la autoidentificación de un sujeto político y de una cultura política. Precisa la puesta en valor de ideas estratégicas de transformación para dar una respuesta racional, emocional y simbólica a la complejidad de los problemas y las necesidades existentes, con potencialidad para avanzar en sus soluciones a través de una dirección adecuada y de una mayoría social y, por lo tanto, con capacidad para liderar políticamente el bloque social.
- Partido político
El partido es una organización política formaliza, a diferencia de los otros dos conceptos en los que sin embargo se inserta, que aspira mediante la representación política electoral a ofrecer alternativas y liderazgos para gobernar, contribuyendo, mediante el liderazgo de su espacio político, a que el bloque social al que pertenece alcance la hegemonía social.