EL PAÍS | La tercera fuerza política valenciana, que cuenta con seis diputados en las Cortes, un diputado en el Congreso y tres concejales en la ciudad de Valencia, entre otros representantes en las instituciones, ha iniciado este fin de semana un proceso que transformará su estructura de coalición entre partidos en lo que su portavoz, Enric Morera, describe como “una cooperativa política basada en la pluralidad” o un nuevo modelo político “unido y diverso”.
Compromís emprende, con la celebración de una asamblea en Les Valls del Vinalopó, un calendario de organización por comarcas que también se desarrollará en el ámbito local, con la constitución de órganos de dirección en las principales ciudades. Una asamblea de carácter informativo celebrada ayer en el Teatre Micalet de Valencia dio, de hecho, el banderazo de salida a ese proceso en la capital.
La principal novedad de la estructuración de Compromís, que ya tuvo hace unos meses un precedente con la constitución de su ejecutiva nacional, consiste en la incorporación de partidos y grupos de ámbito local y, sobre todo, de los “no adscritos” a su funcionamiento orgánico, es decir de las personas que se han acercado al movimiento sin pertenecer a ninguno de los partidos que integran la coalición: el Bloc Nacionalista Valencià, Iniciativa del Poble Valencià y Els Verds. Según las cifras que maneja la dirección, cuando el próximo mes de marzo se constituya el Consell General de Compromís, integrado por unas 280 personas, se habrán incorporado a su estructura unos 5.000 independientes, una cifra similar a la que suman los militantes de los tres partidos políticos coligados en su seno. Esos 10.000 militantes de la formación y las favorables expectativas que le otorgan las encuestas serán las palancas sobre las que Compromís afrontará su propósito de “liderar una candidatura de ámbito estatal a las elecciones europeas de 2014”.
La reciente celebración de un acto de Compromís en Madrid tenía el objetivo de abrir vías en esa dirección. Según Morera, “el reto europeo es sustantivo para Compromís”, ya que pretende buscar en ese ámbito resonancia para construir “una alternativa en positivo” a las políticas de recortes y de “austericido” que se están aplicando. “Estamos dispuestos a trabajar con más gente por una alternativa basada en las ideas de rescatar a las personas, de denunciar la deuda ilegítima, de reivindicar una Europa para los ciudadanos y de apostar por la economía del bien común”, señala el dirigente de Compromís. Morera confiesa que su formación mantiene conversaciones con otras organizaciones y que ambiciona llegar a constituir una candidatura para el Parlamento Europeo que sea capaz de aspirar a un millón de votos en el conjunto del Estado español. Esa aspiración enlaza con la de que la nueva estructura de Compromís, hecha “de abajo arriba”, sea “un instrumento eficaz” en la construcción de una “alternativa política y social” al PP en el País Valenciano.
La nueva organización implica también cambios en el sistema de elección de los candidatos de Compromís, que surgirán de elecciones primarias. El portavoz parlamentario de la coalición y secretario general del Bloc no quiere pronunciarse sobre sus aspiraciones en ese terreno, que pueden chocar a la hora de optar a encabezar las listas a la Generalitat con las de la diputada Mònica Oltra. “Las personas son secundarias. Entre nosotros predomina la voluntad de equipo”, se limita a señalar.
En la asamblea de la ciudad de Valencia celebrada este sábado, el portavoz de Compromís en el Ayuntamiento, Joan Ribó, apostó por “una red cada vez mayor de personas adheridas a la coalición”. Según Ribó, “Compromís es una plataforma de convergencia ciudadana, un proyecto con mucho futuro”. El portavoz local anunció que mantendrá su “tarea de oposición contundente al gobierno de Rita Barberá” y abogó por consolidar Compromís como “la vanguardia que ha de posibilitar el cambio político e institucional” tanto en Valencia como en la Generalitat.