La crisis es el gran aviso sobre el agotamiento del sistema capitalista globalizado cuya motivación general se basa en la acumulación y reposición de la tasa del beneficio del capital y no en las necesidades reales de la sociedad. Básicamente el agotamiento del sistema se manifiesta en cinco áreas críticas:
a) La alteración del metabolismo ecológico. El productivismo y el consumismo que necesita el capital para reproducirse en el actual entorno tecnológico está agotando los recursos naturales y emitiendo contaminación en cantidades no asimilables por el planeta.
b) La desvinculación entre la economía financiera y productiva, por la mayor rentabilidad de aquella, lo que ha provocado una enorme burbuja y la proliferación exponencial de los especuladores.
c) El aumento de las desigualdades sociales y territoriales en múltiples direcciones: dentro de los Estados; entre géneros; entre áreas geográficas culturales y entre los propios Estados.
d) La colonización de la sociedad por los valores del mercado. La sostenibilidad de la sociedad es el fin de todo el sistema social. La sociedad (las sociedades), como esfera de los valores de uso y de la consiguiente identidad y diferenciación cultural, debe ser el ámbito prevalente de todo el sistema. Sin embargo, la globalización ha convertido en hegemónicos los valores de cambio y está homogenizando las identidades hasta convertirnos en un magma donde las personas carezcan de espacios de autonomía frente al poder económico.
e) El adelgazamiento de la democracia y de la conciencia universal de los valores. Entre las ofertas políticas y los electores se interponen los grandes grupos mediáticos; los partidos gestores del sistema han convertido las elecciones en una especia de pacto entre sí (teatralización de las diferencias; consenso en lo fundamental) y con el electorado (delegación de la política a cambio de acceso al gran consumo). Al mismo tiempo la consolidación del Estado – nación subordinado a un mercado globalizado permite un filtro en las conciencias para que los valores universales se tornen en particulares (sólo para los que posean la nacionalidad).
La crisis ha puesto en evidencia la necesidad objetiva de un cambio radical sobre todo porque los resultados de la alteración del metabolismo planetario no son aplazables y a su vez sus causas no pueden combatirse aisladamente del conjunto del sistema porque son efectos del mismo.
Este cambio radical solo puede conseguirse mediante la política, mediante la política democrática, es decir obteniendo los defensores de la transformación del sistema, mediante un proceso comunicativo, la confianza de la mayoría de la población.
P36 quiere ser la piedra que, en Andalucía, produzca la bola de nieve que produzca la avalancha del cambio sustantivo, es decir: Andalucía por si (nuestra sociedad y nuestra estructura de poder autonómico), para Iberia (una estructura geográfica natural que debería ser la sede del poder federal, hoy reducido de forma incompleta a España, tanto geográfica como federalmente) y la Humanidad (sin duda, el ámbito básico de cuya sostenibilidad dependen todos los demás ecosistemas biofísicos y politicosociales).
Copio y pego mi anterior opinión.
Que asi por arriba no se llega a ningún sitio decente. Los partidos politicos tal cual son hoy estan en crisis. La politica no esta en crisis, porque la politica la tutelamos los ciudadanos.
Yo sólo reconozco dos posibles movimientos politicos y si me esfuerzo hasta tres, que son:
1º- Politicos por y para el desarrollismo economico de los pueblos insostenible, los hay en el PP, en el Psoe, en Izquierda unida, en los partidos nacionalistas y otros partidos.
2º- Politicos por y para un desarrollismo economico de los pueblos sostenible, También los hay en el PP, en el Psoe, en Izquierda unida, en los partidos nacionalistas y otros partidos.
3º- Politicos por y para un desarrollo economico de los pueblos, lento, pausado a la par con el desarrollo cultural de las personas y de los recursos, también los hay en el PP, en el Psoe, en Izquierda unida, en los partidos nacionalistas y otros partidos.
Por aritmetica politica, por intereses “el que se mueve no sale en la foto”, por listas electorales cerradas, por intereses del poder “de tener a la gente amansada y encerradita en el color de su partido”, por no haber realizado una educación critica, por la adicción al consumismo, por la no libertad de voto de los parlamentarios/as sumidos en una representatividad politica en las cortes del “brazo de madera”, por muchas cosas mas y corto porque me estoy cabreando….
Por eso el sistema nos obliga elegir entre partidos obsoletos sin democracia interna, por eso no se puede empezar por arriba, por eso hay que empezar desde abajo como:
CREEMOS UN PARAGUAS POLITICO (EJEM FORMULA COALICIÓN O CONFEDERACIÓN)CON UN NEXO COMÚN “POR UN DESARROLLO SOSTENIBLE DE LOS PUEBLOS” EN EL QUE QUEPAN POLITICOS DE TOS LOS PARTIDOS, POLITICOS QUE SEAN VALIENTES Y SE SALGAN DE SUS CARCELES IDEOLOGICAS. Politicos del futuro.
CONSTRUYAMOS ESE ESPACIO.
Estando de acuerdo no puedo dejar de preguntar si sera posible establecer una alianza de fuerzas políticas que genere esa bola de nieve de la que hablas, arrastrando a la opinión pública y al electorado de izquierdas a una nueva convocatoria capazaz de romper con el bipartidismo y hacer realidad el voto de izquierdas comprometido con el cambio y la transformación del sistema económico y social, vinculado a una Nueva Izquierda profundamente democratica y socialista que altere radicalmente la cultura de consumo y nos haga repensar sobre la Ecologia social y económica como instrumento de proyección para un futuro autenticamente sostenible, más haya de la etiquetas en boga.
Pasar del deseo a la voluntad, pero sin olvidar que las dificultades son serias: ley electoral injusta que genera un voto útil hacia el PSOE y desconfianza hacia las izquierdas salidas de la cultura comunista y por que no, también hacia un andalucismo que en ocasiones ha estado pactando con alternativas y estrategias de derechas.
Lo hemos escrito ya: más Democracia= control de los mercados=participación popular.Etc.
Esta primera parte pretende establecer el contexto general para a continuación abrir un debate sobre estrategia electoral, un tema que parece tabú porque apenas hay artículos al margen de las publicaciones especializadas.
Yo creo que habría que hacer un diagnóstico mucho más detallado de los por qué, Jose María. Lo que sí pienso es que P36 tiene casi la obligación de contruir una alternativa político-social más allá de esta web, tiene motivos más que suficientes y los ingredientes adecuados. Sólo falta, creo, un poco de decisión y una apuesta valiente.
El pueblo andaluz lo necesita.
Pues si, buena la reflexión. Pero lo del comportamiento electoral… la izquierda (IU) con la que cae en las encuestas obtiene un 6%, otra izquierda ni aparece siquiera. El andalucismo clásico no acaba de repuntar y se hunde cada día más en el olvido de los andaluces gracias a su invisibilidad y su impericia. Y el ecologismo político pues no pasa de unos pocos (muy pocos) miles de votos a pesar de su beligerancia y su activismo. Quizás sea que estamos en el país de nunca jamás y todos tengamos el complejo de peter pan.
Magnifica reflexión, Rafa, como todas las tuyas. Salú con libertá. Antonio
Veo que es tiempo de conclusiones Rafa, y éstas las comparto plenamente. Sintéticas y contundentes.