Espartaco y Epicteto son dos geniales ilusos: el uno de la acción política, social, revolucionaria; el otro de la acción moral, íntima, evolutiva. Sin ambas quimeras vitales, ¿qué sería de nosotros? ¿Qué sería de la vida?
Aforismo XII, penúltimo, del Ideal Andaluz. Manuel de Palacios
Aunque pronto hará un año que Paralelo 36 Andalucía se presentó públicamente en Sevilla (27/11/2008), es ahora cuando empieza a tomar conciencia del rol político que debe asumir sin prejuicios, valientemente. Entonces apareció ante los medios de comunicación como una revista de pensamiento político. Hoy es más que eso. Y mañana, debe serlo aún más.
Decía Ángel Ganivet que “las ideas vienen antes que la fuerza, pero la fuerza se deja ver antes que las ideas”. El mal que ha asolado la solidez de una opción electoral netamente andaluza, sin injerencias ni dependencias del centro económico y político del Estado, vino por la muerte de las ideas. Por su abandono. La fuerza murió de inanición. Y ahora ha dejado prácticamente de verse.
La idea que vino antes que la fuerza durante la transición democrática, se aferró como un clavo ardiendo a la consecución de la autonomía de primer rango. Una vez conseguida, el pueblo andaluz dejó de ver otro horizonte por el que luchar, en el que creer. La idea motor que sirvió de utopía aglutinadora, murió como mueren las utopías: o porque se consiguen, o porque se asume su imposible realización. Y unos y otros, la han dado por muerta.
Ahí radica el error. La situación económica, política y social es otra. Y porque es otro el contexto, tienen que ser distintas las respuestas. Existe formalmente una autonomía con un catálogo asombroso de competencias propias. Sin embargo, muchas de ellas se encuentran desactivadas o dependientes de la economía y del poder centralizado. Especialmente las referidas a nuestra calidad democrática. De otra parte, el planteamiento de una tesis política de Andalucía que resuelva la antítesis (excluyente-incluyente) con el endémico problema territorial de España, tiene que partir de un nuevo enfoque europeísta y globalizador. Justo la propuesta del último Infante y el estertor intelectual de José Aumente. Nada de eso se ha hecho últimamente. Tiempo muerto en que los intelectuales han obviado a Andalucía y sus políticos han estado más pendientes de los escaños y los micrófonos.
Retomando la hipótesis de Ganivet, nunca como ahora deben hermanarse fuerza e idea en Andalucía. Y si las ideas tardan en verse y la fuerza tarda en llegar, la estrategia eficiente pasa por conseguir visualizar las nuevas ideas y precipitar la fuerza. Como la ley de los vasos comunicantes. El recipiente más ancho corresponde al espacio ideológico. El de mayor cabida. El recipiente más estrecho, el activista político. Y ambos, con idéntica presión.
Se mantienen asombrosamente incólumes los pilares que defendió José María Izquierdo en los albores del XX para alcanzar una autonomía real andaluza: “la tierra, la urbe como convivencia, y una concepción de la cultura en libertad”. La tierra es hoy la reivindicación ecologista e identitaria más rabiosamente contemporánea de respuesta alterglobalizadora a la crisis multifuncional del sistema capitalista. El sustrato sobre el que debe recaer el cambio de modelo productivo. La línea de pensamiento activo que evidencie la necesidad de recuperar nuestro espacio y nuestro tiempo. En la urbe como convivencia confluyen memoria y futuro. Medio planeta se está planteando nuevos modelos sostenibles y viables para las ciudades en transición. Y Andalucía, igual que en la tierra, encierra un paradigma en su configuración territorial con una red envidiable de ciudades intermedias plagadas de espacios naturales para el encuentro. Quizá la mejor herencia del urbanismo bético-andalusí y una de las claves para que tuviera lugar en Andalucía el primer renacimiento de Europa. La otra, sin duda, fue su concepción de la cultura en libertad. Andalucía es la cuna y el cementerio del pensamiento heterodoxo. Se alimenta de lo que dijeron sus pensadores libres, una vez liquidados, por supuesto. Esta trilogía se mantiene intacta: Tierra, urbe como convivencia y creación en libertad. Pero no como realidades, sino como utopías. De ahí la urgencia en generar un espacio libre para el pensamiento ecoandalucista y radicaldemócrata. Para volver a creer. Para tener esperanza.
Paralelo 36 quiere asumir ese papel de liderazgo intelectual por el simple hecho de mantener el espacio. Existir es resistir. Y sin él, volveríamos a la cojera política que ha rezagado a las opciones de poder andaluzas. Blas Infante hablaba de saber y poder como un binomio inescindible. Como cuerpo y alma. Y un partido sin ideas es solo cuerpo. Y las ideas sin poder, un fantasma. De ahí que Paralelo 36 también deba asumir el riesgo prudente de alentar una nueva estrategia política. Que sus postulados no queden en meros cantos al sol. Y la solución pasa por ser coherentes con los tres pilares ideológicos de los que antes hablaba.
Las formaciones políticas que ya existen deben aparcar sus discrepancias banales sobre nombres y marcas, para apostar decididamente por un proyecto de unidad intelectual. Entre los que así lo quieran, redactaremos un documento de principios, un decálogo básico, una bandera común que pueda ser sostenida por quienes antes ni siquiera se atrevían a mirarse a la cara. Y si esto no se consigue desde la mesa camilla de la direcciones generales, al menos que los políticos tengan la humildad y la generosidad de ofrecer esta opción libremente a sus militantes en sus pueblos y ciudades. El máximo esplendor andalusí se consiguió cuando las taifas garantizaron la descentralización política y cultural. Y fueron esas estructuras flexibles las que permitieron después los movimientos cantonales y liberalistas. La unidad ideológica no exige unitarismo estructural ni jerarquías verticales. Ese es el error. Hemos copiado funcionalmente lo que no es nuestro. Lo que es ajeno a nuestra idiosincrasia política. Somos uno desde la diferencia. Juntos por separado. Hagámoslo realidad. Fabriquemos intelectualmente un plano organizativo que permita la federación natural bajo una misma bandera, bajo un mismo cuerpo, bajo una misma alma. Un marca política que simbolice una misma idea, un mismo manifiesto, al que se adscriban en cada pueblo o ciudad los que quieran y como quieran.
Hace 30 años, Manuel Ruíz Lagos escribía esto acerca de las Sociedades Económicas de Amigos del País Andaluz del XVIII: “Quizás hoy, el país andaluz esté más necesitado que nunca de una institución intelectual que con toda la claridad que nace de la libre conciencia pueda dar respuesta a nuestros problemas. Cierto es que tampoco inventaríamos la pólvora, porque no otra cosa fueron los Centros Andaluces de Blas Infante: un lugar donde planificar, idear y levantar anímica y físicamente el alma de nuestra tierra, la conciencia de nuestro país. Es esto lo que equivale realmente a conseguir la autonomía real y el poder del autogobierno de un pueblo que siente y quiere ser libre”.
Pasado el tiempo, sigue faltando eso y más que eso. Los ciudadanos y los políticos tienen que darse cuenta. Pero también los sindicatos, los parados, los empresarios, los movimientos sociales… Decía Al Motamid que no hay nada más imprudente que el exceso de prudencia. Los políticos que miran desde la tapia lo que algunos proponemos, no tienen miedo al riesgo: sencillamente son políticos al uso que esperan el acontecimiento para huir de él o para fagocitarlo. Creo que somos muchos los andaluces y andaluzas que exigimos la acción de quienes han asumido públicamente la responsabilidad de llevarla a cabo. Y no hay nada más imprudente que su pasividad. Y su silencio.
Estrategia Paralelo 36: https://www.paralelo36andalucia.com/estrategia-paralelo-36/
No es tiempo que dentro de la conciencia Andalusi la gente cambien de nombres y apellidos como hizo Ahmad Infante para demostrar mas lo que somos y nuestra identidad en vez de seguir llevando nombres que los impusieron la gente del norte a los Andalusis, es solo un toque de atencion con estas cosas cotidianas seremos mas libres tambien y de pensamiento. un saludo
Muchas gracias por la respuesta. Veo que hay cosas que no has respondido con la misma claridad con la que pregunté, pero entiendo que como en todo hay ciertos límites y hay cosas que no se pueden decir por la estabilidad del proyecto.
Estaremos atentos al blog y a todo lo que vaya saliendo, yo intentaré aportar humildemente lo poco que pueda.
Un saludo.
Una de las estrategias,de las muchas;dificil??.,profunda,fundameltal para el devenir andaluz es el ejercicio con responsabilidad de nuestro papel como consumidores en el ahora de Andalucia.Se hace revolucionario-lo más revolucionario-el euro,un euro,la suma de nuestros euros.Inexcusablemente nuestra primera arma revolucionaria.Por lo más prosaico que parezca,más acequible.por más vanal que suene, más asumible,por más libiano que parezca, mas entendible para todos,y,a su vez no menos consecuente.Compra selectiva para un mejor futuro.No consintamos que nos HAN,o nos HEMOS,vaciados,vencidos.La revolución está en nosotros.Apaga la tele.
Gracias por tus palabras Javier P. Voy a intentar contestar a algunas de tus preguntas. En el Consejo de Redacción de P36 compartimos básicamente las ideas claves que se reflejan en el manifiesto «Por una Andalucía Verde y Libre». Por supuesto que hay una gran pluralidad de enfoques y culturas pero hasta ahora y pienso que también en el futuro, existe un gran respeto y comprensión por todos los puntos de vista y lejos de convertir las diferencias en enfrentamientos las hemos utilizado para hacer más compleja nuestra mirada sobre una realidad social cada vez más poliédrica. Una experiencia curiosa es que en las reuniones del consejo para nada se nota las adscripción políticas o ideológicas, lo que me hace pensar que todos los encasillamientos dentro de los grandes paradigmas (que son los dan respuesta racional y vital a las grandes cuestiones) responen más a tradiciones culturales que ha sistemas sólidos de pensamiento.
En segundo lugar, por supuesto que nuestro deseo principal es abrir P36 y generar un debate social. En este sentido estamos pensando publicar la composición del Consejo Editorial como un órgano más ámplio que el Consejo de Redacción con las personas que se han adherido en las distintas presentaciones y las que se apunten a través del blog. Al mismo tiempo estamos elaborando una propuesta de 50 medidas para el proyecto de transición en Andalucía a partir de las propuestas que se han efectuado en el blog. Pretendemos que la primera reunión operativa del Consejo Editorial pueda debatir las 50 medidas previo que todas las personas que lo deseen hagan su comentario en el blog. Saludos.
A mi me gustaría que, al menos a través de la web, se comenzara un diálogo tranquilo entre los miembros de Paralelo 36 y los que seguimos impacientes vuestros artículos.
Yo me pregunto muchas cosas. Hace falta generosidad, ¿pero piensan ser generosos y valientes los que forman parte de P36 y tienen militancia política? ¿Se quiere que P36 sea un reducto de pocas personas o se va a intentar que haya centros de debate y de opinión política en los pueblos y ciudades de Andalucía? Y sobre todo, ¿éste artículo es compartido por todos los miembros de P36? He leído artículos que dicen todo lo contrario.
Yo estoy de acuerdo al 100% con el artículo, pero creo que si se quiere hacer algo hay que empezar ya, por que sospecho que se está esperando a las municipales e intuyo por qué.
Podemos usar la tierra, la naturaleza, sus recursos, etc pero no podemos caer en el abuso de todo ello.
Es fácil hablar de un «ecoandalucismo», cuando existe una clase política que no se sube a la tapia para mirar, todo lo contrario está escondida detrás de ella mirando por las troneras ,para socabar los fundamentos naturales de Andalucía, el andalucismo y las andaluzas y andaluces.
Autonomía de primer rango, incierto, sumidos en la miseria del subsidio de Madrid llegando incluso a niveles que rozan la agonía de las ideas planificadas desde los estamentos políticos.
La fuerza claro que se hace andando, pero el motor que imprime fuerza al desarrollo se ha olvidado en todo el proceso del pensamiento «ecoandaluz».
Una solución al uso y al abuso es muy sencilla, la hemos tenido en nuestras narices durante siglos y la tapamos, porque tenemos miedo a la estaca, al hambre, a la miseria, a la represión, a la humillación ,etc. Usos que utiliza la clase dominante y la clase política para cometer los abusos sobre Andalucía y las andaluzas y andaluces. Nos paramos para pensar y vemos fuera de la historia a los seres más olvidados, las andaluzas y los andaluces, que no son moros, cristianos, sefardíes, arabes, musulmanes, romanos, fenicios, etc. Son solamente pacientes sufridores de las ideas que aprovechan su fuerza para abusar.
La idea de una Andalucía Verde y Libre, no puede acabar con los abusos, los proyectos solidarios, equitativos, de comercio justo, sin abuso, sí hacen que la idea de una Andalucía Verde y Libre exista, pero contando con las andaluzas y andaluces que tienen ideas, para labrar la tierra, hacer caminos, recoger frutos, economizar gastos, distruir justamente y sin ambición.
Las pensadoras y pensadores de Andalucía, cambiaron el rumbo de Andalucía hacia un sistema inoperante, porque nunca el PSOE, UCD, PCE, PA, etc. hicieron participar a las andaluzas y los andaluces de una idea suya, porque detrás se escondía lo mismo que en las monarquías, caciquismo, franquismo, reino varios, el uso y el abuso para su enriquecimiento personal.
La Andalucía Verde y Libre,la desarrollaron las andaluzas y los andaluces responsables de una economía simple, utilizando la herramienta del intercambio, sin intereses. Los aparceros solidarios que se unían para aunar esfuerzos y combatir el abuso del cacique, rey, estado. Los talabarteros que a cambio de su trabajo recibían lo que no producían, trigo, cebada, habas, garbanzos. Los molineros que usaban la fuerza hidraúlica del agua,para mover un molino y no contaminaban. Así millones de de andaluzas y andaluces simples que conservaron los bosques, el agua, las semillas, la cultura y son los olvidados de la historia y de los pensadores de una Andalucía Verde y Libre.
El pensamiento de una Andalucia Verde y Libre, ha olvidado a los exiliados económicos, que por por el hambre, miedo, injusticia, huyeron para someterse a una represión mayor, la del silencio de su identidad y son parte de Andalucía y se han de recuperar, como el agua, la tierra, las semillas, etc.
Claro que me gusta la idea de una Andalucía Verde y Libre, pero sin estigmas, sin poltronas, sin más sufrimientos, dejando libres tantas ideas como andaluzas y andaluces existen en el planeta.
«Fabriquemos intelectualmente un plano organizativo que permita la federación natural bajo una misma bandera,bajo el mismo cuerpo,bajo una misma alma».
GENEROSIDAD.-Valor y esfuerzo en la empresa.
EMPRESA.-Acción dificultosa que valerosamente comienza.
Lo que necesitamos compartir,porque nos sobra, a los andaluces es generosidad,(los pensamientos negativos y reiterativos nos roban energía y dificultan nuestras relaciones con los demás),tambíen se necesita predisposición,disponibilidad,accesibilidad,altura de miras,el conocimiento de nuestros intelectuales,la sabiduría de nuestras gentes,la pedagogía económica y financiera de nuestros expertos etc…No podemos aceptar un futuro al albúr de los acontecimientos para Andalucia.Los andaluces seremos verdaderamente grandes cuando actuemos apasionadamente por Andalucia,que es lo mismo que por la Humanidad,por todos los hombres.
LA DETERMINACIÓN TIENE GENIO,PODER,Y MAGIA
COMIENZA AHORA….
J.W,Goethe.
Es el artículo más político que te he leido, es puro,no tiene otros aditivos,me parece auténtico y no hace falta que te diga que lo suscribo al 100 por 100, en el contenido y en sus referencias; además es bello. A partir de ahí, lo que podamos, pero teniendo claro que esta ideas son por innovadoras muy minoritarias en la acción política. El ecoandalucismo es el contenido del nacionalismo andaluz del siglo XXI. Este es su valor y su dificultad. Existir es resistir pero también para nosotros es verdad lo inverso: resistir es existir. Abrazo, amigo.
He leido todos los artículos que me mandaís de paralelo 36, creo que ha llegado el momento que esto comince a dessarrollarse por todos los pueblos de esta nuestra Andalucía, aunque el pensamiento de muchos andaluces lo tengámos dormido, hemos de despertalos y ponerlos en práctica, se lo merece andalucía y nuestro gran maestro BLAS INFANTE.
sALUDOS.
Como siempre, de acuerdo contigo.
Pero hace falta que el proyecto comience a funcionar. Quizás así se superen las dudas de muchas personas. El camino se hace andando.
Saludos.