El Parlamento Europeo admite a trámite la denuncia presentada por Primavera Andaluza contra el gobierno de España por autorizar la extracción y almacenamiento de gas en el Parque Natural de Doñana, incumpliendo la normativa europea de protección ambiental y afectando gravemente un acuífero y el hábitat de al menos 10 especies amenazadas (entre ellas, el lince ibérico).
Según informan los portavoces de la organización ecoandalucista, Pilar González y Andrés Sánchez, “presentamos la queja ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo hace un año porque el gobierno de España vulnera la Directiva europea de Hábitats al autorizar instalaciones para el sondeo, extracción y almacenamiento de hidrocarburos en 14 emplazamientos, y una red de 60 kilómetros de gasoductos en Doñana. El gobierno español también invade competencias andaluzas al tomar la decisión sin los informes preceptivos de la Junta de Andalucía sobre los impactos de estas obras e infraestucturas en el Parque de Doñana. No sólo ponen en riesgo nuestro mejor patrimonio, sino que, encima, ni nos preguntan”.
Tras analizar los estudios de impacto ambiental, Primavera Andaluza centró la denuncia en tres aspectos. Primero, la destrucción de 7 hectáreas de hábitats de interés comunitario (dunas, lagos y estanques, matorral y bosque de galería). “Nos recortan hasta Doñana”, denuncian. Empeoran las condiciones de conservación de especies amenazadas como el lince ibérico, la tortuga mora o el águila imperial ibérica, y se privatiza el patrimonio público, al afectarse cuatro vías pecuarias y varios montes públicos en beneficio de la empresa Petroleum Oil & Gas España, S.A.
Segundo, el impacto sobre el acuífero Almonte-Marismas, del que depende no ya sólo el sistema de lagunas de Doñana, sino las necesidades hídricas de miles de personas. La extracción de gas, y su inyección posterior para almacenamiento, pueden alterar las condiciones geológicas que mantienen dicho acuífero, sin que se aporten suficientes evidencias de la seguridad del proceso. “Ponen en riesgo el mayor humedal de Europa sin garantías”, declaran.
Y tercero, las razones de interés público. Lejos de ser la política energética que necesitamos (el consumo de gas se ha reducido sustancialmente en los últimos años, un 17% entre 2008 y 2011, casi el doble que la caída del consumo energético total, el 9%), el proyecto gasista en Doñana de la filial de Gas Natural-Fenosa sólo tiene interés para una corporación que hizo una disparatada apuesta por el gas; que necesita rentabilizar su inversión amparándose en las ayudas y subvenciones a los recursos energéticos propios. “El gobierno de España se vuelve a situar al lado de los intereses particulares y corporativos y enfrente del medio ambiente y el interés general. ¿Hacen falta más pruebas para entender que gobiernan en beneficio de las élites y dando la espalda a la ciudadanía?, se preguntan.
Primavera Andaluza valora muy positivamente la implicación de la UE en la defensa de Doñana, tras la admisión a trámite por el Parlamento Europeo de la queja presentada por la organización. “Parece que en Europa también hay quienes creen que Doñana no se toca”, afirman con alegría. Ya se ha procedido por parte del Parlamento Europeo a solicitar a la Comisión Europea que lleve a cabo una investigación sobre estos hechos, y se requerirá la información necesaria a las autoridades españolas, tal y como recoge la comunicación fechada el 29 de enero de 2014 que Erminia Mazzoni, Presidenta de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, ha remitido a la portavoz Pilar González.
“Vamos a continuar defendiendo Doñana, y remitiremos toda la información que la UE nos vaya enviando a las organizaciones ecologistas, sociales y políticas que se oponen a convertir nuestro Parque en una estación gasista”.