En eso consiste la supuesta recuperación económica española. El crecimiento en un 0,4 del PIB es el producto del consumo publico o de incentivos directos públicos sobre el consumo privado. En el 2014 aumentó el consumo público un 4,45 % , y la demanda interna privada un 0,7% (en parte del aumento del consuno público), es lo que está haciendo la política económica española. Ninguna de las reformas estructurales han tenido éxito en el estímulo del crecimiento .
Volvemos a crecer porque la deuda pública ha crecido en un 300% desde el 2007 y porque el gobierno se ha gastado los intereses del fondo de pensiones, lo cual equivale casi a un 50% de lo fondos actuales. En el año 2007 la deuda pública española era del 36,30% del PIB, en lo que va de 2014 ya está en el 96,80%. Desde los parámetros de austeridad y de contención fiscal del PP; el éxito de su política económica (crecer al 0,4%) se está consiguiendo a costa del gran fracaso (el aumento imparable de la deuda pública). Esto nos muestra dos cosas: una, la falsedad estructural del discurso de la austeridad financiera, y dos que democracia (aunque sea en el grado mínimo y muy imperfecto que hoy gozamos) y austericidio son incompatibles.
Los resultados electorales del 25M van a contribuir, ya lo están haciendo, a que esta contradicción se agudice todavía más. Contenemos el gasto público pero solo crecemos a costa del aumento casi exponencial de la deuda pública. Está claro que el neoliberalismo y la lógica no se llevan bine. En realidad no se trataba de disminuir el gasto público y hacer una economía más eficiente sino de disminuir el gasto social y hacer una sociedad más desigual. La crisis no es una estafa responde a unas causas metabólicas tan estrcuturales que aparecen invisibles a la superficialidad del debate económico y político. Pero la gestión que la derecha está haciendo de la crisis si que es una estafa que solo servirá para que ellos ganen aún más, nosotros aún menos y el tsunami de la crisis metabólica que ya ruge por medio de los indicadores de la economía convencional esté cada vez más cerca.