(Agencia) La Unión Europea afronta «el desafío más grande de la historia» para superar la crisis de deuda que amenaza con llevar a Grecia a la quiebra, lo que generaría graves consecuencias en el conjunto de la eurozona. Esta ha sido la advertencia con la que el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, ha abierto un discurso ante el Parlamento Europeo en el que también ha presentado su propuesta para crear una tasa sobre las transacciones financieras.
«Si nuestros ganaderos, si nuestros comerciantes pagan su contribución a nuestra sociedad, también lo deben hacer los banqueros», ha argumentado Barroso antes de recordar que, en estos momentos en los que hay que reforzar la recaudación y los ingresos, los trabajadores ya están asumiendo importantes sacrificios.
«Ahora nos enfrentamos al desafío más grande jamás conocido en nuestra unión en toda su historia», ha afirmado Barroso antes de reconocer que las turbulencias han sobrepasado los límites del ámbito financiero para transformarse en una «crisis económica y social».
No obstante, el jefe del Ejecutivo comunitario ha defendido que Grecia va a seguir formando parte del euro. «Grecia es, y seguirá siendo un miembro de la eurozona», ha enfatizado Barroso arrancando un aplauso de los diputados.