El consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, ha presentado al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, su dimisión esta mañana al frente de esta Consejería, han confirmado a Europa Press fuentes cercanas al propio Pizarro.
Esta decisión de Pizarro, actual número tres en el organigrama del Ejecutivo autonómico, se ha producido tras tener conocimiento de que el Consejo de Gobierno tiene previsto cesar este martes a Gabriel Almagro como delegado de su Consejería en Cádiz, provincia por la que además es diputado autonómico y a la que ha estado vinculada toda su carrera política, según las mismas fuentes.
La dimisión se produce semanas después de las discrepancias y las distantes relaciones puestas de manifiesto entre la actual dirección andaluza del PSOE y el secretario general del PSOE de Cádiz, Francisco González Cabaña, muy unido a Luis Pizarro y a Manuel Cháves.
El último enfrentamiento público se produjo durante la negociación de la candidatura del PSOE de Jerez de la Frontera a las próximas elecciones municipales. El secretario general del PSOE-A y presidente de la Junta frenó los intentos de la dirección gaditana de incorporar al urbanista Manuel González Fustegueras como cabeza de lista, en perjuicio de la candidata y actual alcaldesa, Pilar Sánchez, cuya designación ya había sido decidida por los órganos federal y andaluz.
La dimisión del consejero de Justicia abre la cuarta crisis del Gobierno de Griñán en dos años. En octubre del pasado año, Griñán tuvo que hacer también frente a una importante crisis, sólo siete meses después del congreso extraordinario que le encumbró como líder del PSOE. Fue cuando su mano derecha, Rafael Velasco, dimitió por el caso de las ayudas a la empresa de su esposa, dedicada a dar cursos de formación y que recibió 726.209 euros en cuatro años de la Junta de Andalucía.
Esta dimisión abre una crisis profunda en el Gobierno andaluz, muy debilitado por las cifras de paro, la corrupción en los ERES y el enfrentamiento con los empleados públicos, así como por la falta de resultados en su relación con el Estado (STC sobre declarando inconstitucional la competencia sobre las aguas del Guadalquivir, frustración del proyecto de caja única andaluza o el fiasco del pago de la deuda histórica mediante “solares”).
La crisis en el Gobierno andaluz se suma a la situación de interinidad que se ha creado en el Gobierno del Estado tras el anuncio realizado ayer por Rodríguez Zapatero de que no se presentará de nuevo como candidato del PSOE.