Los sevillanos comenzaron el año consumiendo menos agua. El primer balance oficial de Emasesa correspondiente a 2010 revela una caída del 5,3% respecto al mismo período de 2008 y del 1,8 en comparación con 2009. La facturación del primer trimestre de 2008 fue de 16.800.075 metros cúbicos, la de 2009 de 16.207.889 metros cúbicos y la de 2010 de 15.901.020 metros cúbicos. Emasesa tiene claro que está reducción del consumo se debe a la «interiorización» de los hábitos de consumo responsable, al decrecimiento de la actividad industrial y al clima del arranque de año, pues se cumple la regla de que a menor calor, menor consumo de agua. Y el primer trimestre no se caracterizó por un a subida de las temperaturas ni siquiera en marzo.
Emasesa trabaja desde hace tres años interpretando los datos en el contexto actual de crisis económica. De hecho, el último indicador publicado revela que la actual crisis económica redujo un 12% el consumo de agua en los bares de Sevilla en el primer trimestre de 2009 en comparación con el mismo período del año anterior. Otra regla de oro es que a menor crecimiento económico, menor consumo en la red.
La bajada del consumo en la hostelería es la más fuerte en los diferentes usos en que se divide y analiza el consumo industrial. Este descenso sitúa los indicadores en los mismos registros que el año 2003. En el consumo doméstico todavía hay campo por delante para seguir mejorando los resultados en el campo del uso racional del agua.
En la Sevilla posterior a la Exposición Universal, las inversiones superaban en muy poco los 7 millones de euros, lo que supone una muestra de la evolución de la empresa. Emasesa ha aumentado sus inversiones en infraestructuras un 640% en los tres últimos lustros. Este esfuerzo inversor ha sido una de las causas de la tendencia a la baja en la demanda de agua desde 1992.
El descenso en el gasto del agua ha sido distinto según los usos. El consumo industrial experimentó una subida que resultó frenada en el primer trimestre de 2008, que es cuando comienza una tendencia a la baja que se mantiene aún. Cualquier empresa que gestiona el agua puede presumir si consigue bajar los índices de consumo, más aún si es de capital totalmente público.
Emasesa trabaja para conseguir la información precisa sobre el número exacto de inquilinos del cien por cien de las casas a las que abastece con la finalidad de ajustar las facturas al consumo exacto y evitar la bolsa trampa de clientes que, por ejemplo, se benefician de las casas vacías cuando se trata de comunidades de vecinos donde aún operan los contadores generales. Hay casi 390.000 pisos de los que no setiene constancia del número preciso de habitantes. Mediante el denominado Plan Cinco, las viviendas con contador general han pasado a representar sólo el 50% del total, cuando hasta hace poco eran el 71%. La información censal de una vivienda, clave para que el cliente pueda aspirar al plan de bonificaciones por uso racional, se notifica mediante varias fórmulas de las que se ofrecen detallada información en las oficinas de Emasesa.
Publicado en Diario de Sevilla .07/07/2010.