Desde el comienzo de nuestra andadura, Paralelo 36 Andalucía ha priorizado dos objetivos: promover la cooperación política de la izquierda andaluza, desde su renovación ideológica y política, e impulsar el cambio en Andalucía, tanto internamente como en sus contextos institucionales fundamentales: el Estado español y la UE.
Desde entonces hemos visto realizado una parte de nuestros objetivos, sobre todo en la cooperación política de la izquierda cuyo cenit se ha alcanzado en la consecución de las candidatura de Unidos Podemos por Andalucía en las elecciones generales del 26 de junio de 2016 a la que hemos apoyado por completo siendo la primera vez que la diversidad política de las personas que formamos la asociación coincidimos en torno a una misma opción política electoral.
Después de los resultados de las elecciones de este 26 de junio de 2016 se abre una nueva etapa para toda la ciudadanía del Estado y en particular para las andaluzas y andaluces que nos obliga a redoblar nuestro compromiso con Andalucía y ofrecer nuevas propuestas, fruto de la reflexión y el debate que hemos ido acumulando en P36, en el contexto de esta época caracterizada por la crisis de la globalización y el agotamiento de los modelos económicos e institucionales de la era industrial.
Andalucía tiene potencialidades para afrontar los nuevos retos de la transformación que necesitamos aunque el cambio político no se haya realizado aún con la misma intensidad que en otros territorios del Estado ya que la Candidatura de Unidos Podemos por Andalucía ha tenido escaso perfil; en las elecciones han quedado primero y segundo el PP y el PSOE, las fuerzas del bipartidismo, y en la Junta gobierna la parte más neoliberal del PSOE con el apoyo parlamentario de Ciudadanos.
Estas circunstancias limitan considerablemente tanto la perspectiva del cambio imprescindible en Andalucía, donde la desigualdad interna y externa se ha hecho estructural, como el impulso del proyecto de construir un Estado federal plurinacional en el que Andalucía tenga la misma consideración y competencias como la que más y en el que se construyan estructuras de participación cooperativas y multiláteras en la formación de la voluntad del Estado en todo lo que nos afecte y para la toma de decisiones en la Unión Europea.
Para superar esta situación queremos contribuir activamente a que Andalucía lidere el cambio tanto interna como externamente poniendo en valor nuestro patrimonio constitucional forjado especialmente en los procesos de movilización del 4 de diciembre y en el referéndum del 28 de febrero en donde Andalucía conquistó el derecho a tener un nivel de autonomía como la que más. Por lo que proponemos:
-
Consolidar la unidad de la izquierda, más allá de cualquier tentación sectaria, cimentándola en la base, pueblo a pueblo y barrio a barrio, a través de un funcionamiento democrático que busque el consenso para construir un espacio amable y bajo en testoteronas, y con una estructura andaluza con primarias que garanticen la pluralidad.
-
Poner en el énfasis en la política de calle y en la movilización, con una agenda social que de respuesta a las necesidades de la gente que más está sufriendo la crisis, porque la acción en estos momentos es lo que puede hacer que avancemos ante el impasse institucional y es además un mecanismo unificador que teje vínculos que nos dotan de un sistema inmunológico contra ese terrible enfermedad política que es el sectarismo.
-
Impulsar un programa que ofrezca garantías sociales para toda la ciudadanía, profundizar en la democracia, basado en elementos educativos y culturales que nos haga reconocibles como pueblo acogedor, solidario y universal, transformar radicalmente nuestro modelo productivo desde parámetros de sostenibilidad con el objetivo imprescindible de acabar con el paro, la pobreza y el empleo precario y alcanzar las cuotas de autogobierno necesarias para disponer en especial de una soberanía básica que implique la autonomía energética, alimentaria y financiera, para lo que necesitamos la fuerza de un andalucismo de mayorías, profundamente democrático y ecosocial y trabajar en la consecución de un gobierno de izquierdas que pueda llevar adelante este programa.
-
Un nuevo papel de Andalucía en la construcción de una mejor estructura territorial del Estado, una estructura federal y plurinacional que, desde la integración voluntaria, cada territorio pueda decidir su status desde la cooperación y la pertenencia a una Unión Europea democrática y confederal.
-
Como objetivo inmediato reivindicamos la constitución de un grupo parlamentario propio, dentro de una estructura federal del grupo parlamentario de Unidos Podemos, para los diputados y diputadas andaluces de Unidos Podemos Por Andalucía en el Congreso, de acuerdo con la consideración de Andalucía como sujeto político propio y con la plurinacionalidad del Estado.
Antonio Luis Girón
Maria del Carmen González Rodríguez
Jose Antonio Jiménez
Jose Antonio Pino
Rafa Rodríguez
Juan Antonio Ruiz Giraldo
Osuna, 2 de julio de 2016
Si, es hora de remover conciencias inmovilistas, casi cuarenta años de políticas centralistas han situado a Andalucía en el carro de la mierda de Europa, y solo son quienes han llevado las riendas los responsables de este malo y pestilente viaje. El patrón andaluz sigue promoviendo la miseria como método de sometimiento y beneficio propio, incluso han venido «emprendedores» de fuera para adoptar un ejemplo que les resulta a todas luces rentable por el bajo precio de la dignidad en nuestra tierra. Reeducar a la fuerza de trabajo y a sus pagadores en nuestro país es una tarea ineludible. No abra futuro posible. También es una tarea ineludible poner al tejido productivo bajo las luces y bajo las lupas de una alcabala intransigente. Empecemos por ahí.