Andalucía cuenta, entre otras potencialidades, con un conjunto de recursos naturales, valores paisajísticos, o recursos hídricos, nuestro gran río, símbolo de Andalucía, que conforman nuestro medio ambiente, nuestro ingente patrimonio natural, sobre el que tenemos la obligación colectiva de proteger y entregar intacto a las generaciones futuras.
El Estatuto de Autonomía de Andalucía de 2007 incluye, entre los objetivos básicos de la acción de los poderes públicos de Andalucía: “La mejora de la calidad de vida de los andaluces y andaluzas, mediante la protección de la naturaleza y del medio ambiente, la adecuada gestión del agua y la solidaridad interterritorial en su uso y distribución, junto con el desarrollo de los equipamientos sociales, educativos, culturales y sanitarios, así como la dotación de infraestructuras modernas” (Art. 10.3.7 del Estatuto de Autonomía de Andalucía).
El artículo 28 del Estatuto de Autonomía de Andalucía establece la “versión andaluza” del derecho al ambiente en unos términos más actualizados y completo que el artículo 45 de la Constitución Española. Se proclama en el texto estatutario que todas las personas tienen derecho a vivir en un medio ambiente equilibrado, sostenible y saludable, así como a disfrutar de los recursos naturales, del entorno y el paisaje en condiciones de igualdad, debiendo hacer un uso responsable del mismo para evitar su deterioro y conservarlo para las generaciones futuras, de acuerdo con lo que determinen las leyes. Se garantiza este derecho mediante una adecuada protección de la diversidad biológica y los procesos ecológicos, el patrimonio natural, el paisaje, el agua, el aire y los recursos naturales. Asimismo se expresa en el artículo 28 que todas las personas tienen derecho a acceder a la información medioambiental de que disponen los poderes públicos, en los términos que establezcan las leyes.
Asimismo, el nuevo Estatuto de Autonomía contiene un importante artículo 37 en el que se establecen hasta 25 principios de las políticas públicas de la Comunidad Autónoma de Andalucía. En el número diez se proclama como principio “el respeto del medio ambiente, incluyendo el paisaje y los recursos naturales y garantizando la calidad del agua y del aire, y en el siguiente se expresa “el impulso y desarrollo de las energías renovables, el ahorro y eficiencia energética” como principio de las políticas públicas de Andalucía.
En cuanto a las competencias medioambientales de Andalucía, en artículo 57 del Estatuto de Autonomía establece que nuestra comunidad autónoma tiene competencia exclusiva sobre una serie de materias como montes, aprovechamientos y servicios forestales; vías pecuarias; marismas y lagunas, y ecosistemas acuáticos; pastos y tratamiento especial de zonas de montaña; delimitación, regulación, ordenación y gestión integral de los espacios naturales protegidos, incluyendo los que afecten a las aguas marítimas de su jurisdicción, corredores biológicos, y hábitats en el territorio de Andalucía, así como la declaración de cualquier figura de protección y establecimiento de normas adicionales de protección ambiental; flora y fauna silvestres, o prevención ambiental. Como sabemos el Tribunal Constitucional (sentencia 30/2011) anuló el artículo 51 de nuestro Estatuto y perdimos la competencia exclusiva sobre el Guadalquivir, nuestro símbolo, nuestra “columna vertebral” y factor de desarrollo económico y social, facultad que deberemos intentar recuperar a través de lo previsto en el articulo 150 de la Constitución, por transferencia o delegación.
Además, otra gran novedad del nuevo Estatuto de Autonomía de Andalucía de 2007 es que dedica un título específico al medio ambiente, el título VII (del artículo 195 al 206), que se estructura en los siguientes bloques temáticos: conservación de la biodiversidad, uso sostenible de los recursos naturales; producción y desarrollo sostenible; Residuos; Desarrollo tecnológico y biotecnológico; Prevención de incendios forestales y lucha contra la desertificación; Protección ante la contaminación; Desarrollo rural; Uso eficiente del suelo y sistemas integrales de transporte; Utilización racional de los recursos energéticos; Protección de los animales; y el último artículo del título “medioambiental” que se dedica a incentivos y medidas fiscales.
Revisados los principales contenidos medioambientales de nuestro Estatuto de Autonomía, es interesante destacar que tanto nuestro texto de 2007 como nuestra Constitución de 1978 establecen una conexión entre calidad de vida y protección ambiental, asunto que es muy importante desde el punto de vista axiológico, de los valores, como concepto de modelo de Estado y de políticas públicas. Es un asunto central, que también aparece, como hemos dicho, en el artículo 45 de nuestra Constitución, aunque no estrictamente como derecho fundamental especialmente protegido, sino como principio rector de la política social y económica, con valor de jurídico no de derecho fundamental, sino de principio informador de la legislación positiva, la práctica judicial y la actuación de los poderes públicos, que no implica aplicabilidad o vinculación directa.
Respecto al conjunto de valores que constituyen el medio ambiente de Andalucía, considerados en el ámbito municipipal, es muy importante constatar que se ha desarrollado en nuestra tierra una creciente demanda social y ciudadana para definir y aplicar políticas ambientales a nivel local, con el objetivo de poner en práctica estrategias municipales de sostenibilidad. Metodológicamente, los contenidos de las políticas locales de medio ambiente que se desarrollen en Andalucía han de ajustarse a la realidad de cada ámbito territorial, y debieran elaborarse con la participación más amplia posible en su elaboración. Además, para la eficacia de la política medioambiental son imprescindibles acciones permanentes de educación e información ambiental, con el doble objetivo transversal de hacer más ambiental la actuación municipal en su conjunto y más informada y comprometida a la ciudadanía.
Los ejes estratégicos de una buena política local de medio ambiente a desarrollar en los Ayuntamientos andaluces debieran establecerse en necesaria coordinación con las políticas medioambientales autonómicas, como debieran ser en materia de gestión de los residuos urbanos con el objetivo de la consecución del ciclo integral de los residuos urbanos, la gestión sostenible del agua, o el fomento del transporte público colectivo, contribución desde lo local a la aplicación de la normativa sobre calidad del aire, o diseño de políticas de eficiencia energética, medidas serias contra la contaminación lumínica y acústica.
En este nuevo período que se abre en este mes de mayo de 2012, la apuesta por el medio ambiente debe pasar a ser una política con mayúsculas, con un papel central y transversal en la acción autonómica y local de Andalucía. La coordinación de las acciones locales con las políticas medioambientales de Andalucía será esencia en el nuevo tiempo político que se inicia con el nuevo gobierno de la Junta de Andalucía, que según el acuerdo programático las cuestiones medioambientales serán estratégicas y transversales. Y en todo caso, que los poderes locales y el autonómico deben ejercer sus políticas de medio ambiente y de ordenación del territorio en alianza con el poder ciudadano, caminando también en este terreno hacia la profundización democrática, apostando por uno de los objetivos esenciales y actuales del Estado Social: la defensa del medio ambiente.
Ana Cecilia, me alegra¡¡¡. Claro que sí, estamos en contacto, a tu disposición.
Estimado Angel, recibe un cordial saludo desde la Municipalidad de Santiago de Surco en Lima – Perú desde donde coincidimos en la importancia que los gobiernos deben dar al tema ambiental. Se trata de decisiones políticas fundamentales por la que no todos apuestan.
Tal vez no me recuerdes, hace algunos años acompañando al entonces Alcalde de Surco, Carlos Dargent visitamos la Empresa Municipal en donde ejercias el cargo de vicepresidente, ver las instalaciones y conocer las experiencias desarrolladas en ´la ciudad fueron valiosas para nosotros que regresamos a Lima para replicar algunas de ellas. Surco ha sido el primer distrito en implementar una política de recogida selectiva y hoy luego de 05 años en que regresamos a dirigir los destinos del distrito en esta ocasión con Roberto Gómez Baca buscamos recuperar lo que para la anterior gestión no fue una prioridad. Me gustaría poder retomar el contacto e intercambiar experiencias en un tema que nos apasiona como es la defensa del ambiente.
Abrazos desde Lima – Perú y exitos en la gestión
Ana Cecilia
De entrada, debería suspenderse el proceso «express» a trvés del que se pretende elaborarse los II PDS de diez de los espacios naturales protegidos., entre ellos el del EN Sierra Nevada, y el I del PN del Estrecho que la consejería quiere merendarse antes de septiembre mediante una pantomima de participación