por Mario Ortega.
Desde que iniciamos la andadura para llevar la Iniciativa Legislativa Popular para abolir los espectáculos cruentos donde se tortura, veja y da muerte al toro, vengo oyendo voces que dicen «ahora no, no es el momento,» embarcado en actividad política diaria la pregunta sobre la pertinencia de la ILP antitaurina me condujo directamente a la duda y la reflexión.
Otorgar o no derechos a los animales es un asunto en el que cada persona toma posiciones. Apostar por la prohibición de la tortura animal es trascendente en el sentido de que una posición mayoritaria de la sociedad a favor de acabar con fiestas crueles con animales significa un cambio de conciencia social, una aproximación a la naturaleza, una reversión de milenios en los que la especie humana, al percibir los límites planetarios de su existencia, vuelve la mirada a la naturaleza y comienza a dejar de huir de ella, sintiéndose de nuevo parte y no dueña. Esta circunstancia se produce con anticipación en las sociedades tecnificadas donde más se sufre la lejanía y ruptura con nuestro ser natural.
La respuesta vino de la mano de Emilia Moreno presidenta de CIMA-Córdoba (Comisión Investigadora del Maltrato Animal). Esta mujer valiente me dijo «mira Mario, a las personas que te dicen que no es el momento diles que le pregunten al toro cuándo es el momento.» Impecable.
Al mismo tiempo andábamos buscando un nombre para la plataforma que debe defender y recoger el mínimo de 75.000 firmas en Andalucía para que la ILP pueda ser debatida en el parlamento. Cuando proponíamos nombres del tipo plataforma andaluza contra el matrato y la abolición de los espectáculos taurinos y por una Andalucía civilizada, con cierto aire de cautela Emilia dijo «un nombre así no es un nombre, yo tengo uno que se le ocurrió a mí hija.» Emilia casi no se atrevía a ponerlo sobre la mesa, la animé insistentemente, finalmente dijo «La Voz del Toro«, un rayo de luz iluminó la plaza de la Corredera en Córdoba, pensé «la voz de los sin voz, qué fantástica intuición y qué fondo de ecología política, los animales, las generaciones futuras, la naturaleza, la infancia, los que no deciden, los que no tienen voz,…»
Pero hay más, cuando Emilia vino al II Taller de Cooperación Política P36 para exponer sus razones durante diez minutos, hay un momento en el que reconoce el apoyo de Los Verdes, entre los escasos que ha recibido, diciendo «si Los Verdes son capaces de defender así a los animales, ¿qué no harán por las personas? Contundente respuesta para quienes piensan que con el montón de problemas que tiene la humanidad éste ahora no es importante. La lucha por los derechos es siempre importante, avanzar en los derechos de los animales es blindar cada vez más los derechos civiles, las libertades individuales.
Después, días después, comprobando que tras el primer impulso de CIMA sus medios eran escasos, por no decir escasísimos, me preguntaba cómo habría decidido esta mujer tirar para adelante de una ILP que requiere un esfuerzo descomunal. Me acorde entonces, salvando las distancias, de la mujer negra que un día decidió no ceder el asiento del autobús a un blanco, su gesto provocó una convulsión en el país con racismo institucionalizado legalmente que era entonces Estados Unidos. Un gesto que atravesó el corazón del poder, un gesto que rompió la desidia del conformismo. Alguién tenía que hacerlo en Andalucía, Emilia lo hizo. Ganar o perder deja de tener importancia ante la magnitud simbólica del gesto.
Las firmas se van a recoger, y la posición de los partidos políticos revelará quién es quién. De momento PP, PSOE e IU han cerrado filas en contra demostrando su alianza con el pasado, demostrando qué significa para ellos la civilización, demostrando que están de parte de una oligarquía andaluza que construyó España contra Andalucía y se alió siempre con el capital y la españolidad que usa lo taurino como identidad.
En un debate televisivo en el que frente a dos señores de traje azul marino encorbatados que hablaban de cultura, identidad, tradición, lidia, arte, y todas esas cosas que se dicen para justificar la sanguinaria matanza, estaba Emilia, mujer menuda que se los llevó por delante con argumentos llenos intuición, racionalidad y sensatez. En medio, a la distancia de los que no toman partido cuando hay que mojarse de verdad, un representante de Ecologistas en Acción ponía sobre la mesa argumentos contundentes contra la mal llamada fiesta, ni las dehesas están en peligro, ni los beneficios económicos relacionados, empleo y productividad se sostienen. La fiesta se lleva más fondos públicos que las ayudas al cuidado de personas discapacitadas. Aún así, para Ecologistas en Acción no es el momento. Me atrevo a decirle a las organizaciones animalistas que no piensan hacer nada ahora, es decir ya, utilizando una expresión taurina, me atrevo a decirles que cantó la gallina.
Afortunadamente AVAT (Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia) sabe que el momento es siempre y han decidido apoyar ya la ILP de La Voz del Toro.
En el mismo debate citado los señores de La Mesa del toro hacían sorna con el nombre de La Voz del Toro, llegando a afirmar con mueca irónica: eso, mañana aparecerá La Voz de la Rana, y es que en la antesala de un nuevo derecho siempre tronaron carcajadas de desprecio.
Queremos que Andalucía sea un espacio permanente de civilización, queremos que andalucía de un ejemplo al mundo de avance civilizatorio.
Si es el momento o no, preguntadle al toro.
En contra de las corridas de toros. No al mltrato animal!!!.Soy de Ronda(cuna del toreo a pié y de grandes dinastias de torenos…Desde luego no es mi Fiesta Nacional y desearia que se abolieran las corridas y dejen de hacer sufrir a los toros.
No creo que ninguna persona con sensibilidad, piense que cualquier momento presente no sea bueno para frenar la tortura de animales inocentes.
Si no, que le pregunten al próximo toro que está en puertas se sufrir el linchamiento público, al que lo someten algunos insensatos con la connivencia de los poderes políticos que solo se representan a ellos solos, porque evidentemente no a los que dicen representar, ya que la mayoría de los ciudadanos están en contra de esa canallada.
Triste e inaudito lo que ha ocurrido en Córdoba. El Pleno del Ayuntamiento y de la Diputación, en las últimas semanas han aprobado por unanimidad una moción para apoyar la “fiesta”. Eso da una idea de los partidos políticos y de sus líderes. Si así se comportan con un ser inocente e indefenso (pero sin voto), ¿como se comportarán con los que le llevan la contraria o compiten contra ellos por el poder fáctico?
Ahora es le momento de terminar con la salvajada impune de las corridas de toros. De demostrarle a esos políticos sin escrúpulos, que están completamente equivocados.