Paralelo 36 Andalucia Espacio de pensamiento y acción política
Francisco Garrido.
(I) Bitcoin.
La moneda es un producto del poder político, como la ley; y todo lo que no sea concentrar el monopolio de la producción de moneda en el Estado democrático de derecho es un ataque a la democracia: ya sea por desplazamiento de esta competencia política a los bancos o a poderes políticos ocultos y privados (bitcoin).Esto lo pone de manifiesto la crisis financiera actual donde los bancos ha asumido de forma no democracia la producción de dinero y el ciberataque de esto últimos días cuyos beneficios se refugian en poderes políticos privados y ocultos conformados en los entornos criminales de los bancos y los Estados .
(II). La ciberseguridad.
La ciberseguridad puede llegar a ser , posiblemente ya lo sea, mucho más peligrosa que los ciberataques . Y no sólo por que suponga una más que factible amenaza para la intimidad y los derechos individuales, un instrumento de control social (el panóptico universal) o una estrategia de privatización de la información y el conocimiento. La ciberseguridad alienta la ilusión y la tentación de una clausura total las ventanas o puertas de acceso a los códigos que permiten el control y la reprogramación de los códigos fuentes . La estrategia de “tirar la llave después de fabricado“ puede suponer la autonomía absoluta del programa cuya único límite seria solo la alimentación energética. Esta por ver si es posible una estrategia de programación que implique este “tirar la llave”.. Pero si la única respuesta a una programa autónomo sin control tuviera que se ser el “cortar la luz” los costes serian inconmensurables y no es seguro que llegáramos a tiempo”. La pesadilla del 2001 Odisea en el espacio que aterroriza a Hawkins vendría impulsada por la pulsión de seguridad, como tantas veces en la historia social, pero esta ves a escala inimaginable.
(III) Los dueños de los algoritmos.
La vulnerabilidad que ha mostrado la red es pavorosa pero mas pavor inspira aun la posible reacción de la ciberseguridad. De momento se le ha adjudicado el ataque al “malo oficial de moda”: Corea del Norte. Si hubiese sido hace unos años seria Siria, Putin Chaves , Sadam Hussein o Bin Laden, que mas da, saben que mienten como con el ántrax. No es un enemigo políticamente visible quién se esconde detrás del ciberataque sino algo mucho más siniestro, más íntimo a los mismo poderes que enseñorean la red , los verdaderos dueños de los códigos y el capitalismo de algoritmos; una élite internacional apátrida que gobierna por encima de los Estados. Y no digo que ellos sean quién ha efectuado el ataque, no lo sé por supuesto; sino que ellos son quienes controlan y se benefician de las condiciones que permiten este tipo de acciones (ciberataque) y reacciones (ciberseguridad).
