Paralelo 36 Andalucia Espacio de pensamiento y acción política
Rafa Rodríguez
- Menos relatos y más realidad. La ciudadanía ve, con una enorme preocupación, las amenazas que se ciernen sobre nuestras vidas cotidianas, mientras que los actuales partidos parlamentarios han vuelto la espalda a la realidad a la que han sustituido por relatos que han terminado convirtiéndose en cuentos (como ha escrito Sergio Pascual). Recesión, cambio climático, precariedad y paro, neofascismos, crisis territorial, Brexit (que ha precipitado la quiebra gigantesca de Thomas Cook), etc. parece que no van con las decisiones de los partidos del disuelto Parlamento, que han tenido la oportunidad de hacer posible la gobernabilidad del país y no lo han hecho, a pesar de que nos han puesto en grave riesgo porque carecemos de instrumentos presupuestarios (el presupuesto actual es un presupuesto prorrogado que tendrá que prorrogarse también en 2020) para hacer frente a estos retos. Errejon + Compromis lideran la creación de un espacio renovado de la izquierda que se identifica con el cambio estructural (frente al PSOE) desde una opción democrática (frente PODEMOS – IU). Errejon aporta una sólida base teórica para la izquierda del siglo XXI y Compromis la mejor práctica política y una dinámica federal al proyecto. Ellos son los encargados de recuperar el principio de realidad para la política española y centrar la agenda sobre las políticas públicas necesarias para hacer frente a los actuales retos sobre todo a las necesidades de la gente que sufre el paro, las insuficientes pensiones y la precariedad laboral.
- Ecología. La nueva oferta política es también la creación de un nuevo espacio político: el espacio verde renovado. Esto solo podía pasar en estas circunstancias extraordinarias, las del shock democrático que ha provocado la convocatoria de nuevas elecciones. Errejón + Compromís + destacados militantes de Equo como Inés Sabanés, aportan una nueva visión de la ecología que la pone en primer plano y, además, desde una mejor comprensión de su naturaleza política, como exige la emergencia climática en conexión con la movilización mundial que estamos viviendo con respuestas ya que van desde la huelga general del 27 de septiembre y los planes anunciados por Alemania de reactivar su economía sobre el eje de la lucha contra el cambio climático, a la cumbre del clima organizada por NN.UU. Sin embargo, la perspectiva ecológica apenas se vislumbró en la campaña electoral de las últimas elecciones generales. Una ausencia que, paradójicamente, demuestra que el tablero político estatal, tras el cierre del último ciclo político, había dejado libre el espacio ecosocial. La renovación del paradigma verde implica pasar de la denuncia a las alternativas que deben impregnar la acción de gobierno, convirtiendo lo necesario ecológicamente en posible políticamente mediante la alianza simbólica entre “los que temen el fin del mundo y los que temen el fin de mes”, es decir conectando estructuralmente la transición ecológica y la justicia social.
- Democracia práctica. La nueva oferta política representa la opción por el diálogo frente a la incomunicación que ha existido en la frustrada legislatura que hemos vivido. Como ha dicho Mónica Oltra “somos la argamasa para la construcción de un nuevo gobierno”. La transformación del sistema bipartidista en multipartidista necesita, para consolidar su pluralismo político, un marco que aporte mayor capacidad de diálogo y un entendimiento de los pactos políticos como instrumentos transitorios y no ontológicos.
- Democracia interna. Frente al centralismo y la verticalidad de la estructura interna de Podemos, la nueva oferta electoral puede ser una opción mucho más horizontal, donde Errejón sea el primer impulsor de un nuevo liderazgo colectivo dada la calidad de muchos de sus cuadros y la potente personalidad política de personas como Mónica Otra o Inés Sabanés.
- Una nueva esperanza frente al desencanto y la abstención. El sistema político no es estático (como sí lo es la imagen de una tarta que se reparte) sino dinámico (se expande o se contrae) como puede ser la imagen del mar en la playa que crece y decrece. La convocatoria electoral ha situado a todos los partidos existentes en la bajamar porque todos son responsables del enfado y el desencanto del electorado. Ninguno de los líderes de los partidos existentes va a ser inmune a las consecuencias del shock democrático que implica esta nueva convocatoria electoral (unos se transformarán y otros tendrán que irse). La oferta electoral de Errejón y Compromís se sitúa en solitario en la pleamar. Son los únicos que pueden alentar la participación al dar esperanza de diálogo constructivo para la formación de gobierno.
- Federalismo. La participación de Compromís y la posible participación de otros partidos federalistas como la Marea gallega, Iniciativa del Pueblo Andaluz o Andalucía por Sí, le dan a la nueva oferta política una naturaleza nítidamente federalista alejada tanto del soberanismo y del confederalismo como del centralismo. Hacer realidad la evolución federal, tanto en la construcción de la nueva oferta política como en la alternativa territorial para la democratización del Estado y el reconocimiento de su plurinacionalidad, es una condición indispensable para la renovación de la política española.
- Feminismo práctico. La nueva oferta política es producto en gran parte de la cultura feminista que impregna a nuestra sociedad. Menos machos alfas y menos testosterona y más capacidad de empatía, de comprensión, de cuidados. Como el feminismo, emerge desde el marco del entendimiento de la política como una actividad para la paz y la convivencia, lejos de aquellas culturas que entienden la política como un trasunto del enfrentamiento militar. Por ello, la reivindicación feminista debe ocupar el frontispicio de su agenda política.
