Por Antonio Manuel: "Los moriscos no son ellos: somos nosotros. Ahí radica la cepa del mal. La identidad nacionalista española se construyó artificialmente sobre la negación del otro. Y para conseguirlo impuso dos condiciones que se han incrustado en nuestro cerebro como la nicotina: la limpieza de sangre y el catolicismo. Los moriscos eran hispanos. Católicos en su inmensa mayoría. Conversos o hijos de conversos. Pero descendientes de musulmanes que nacieron y murieron aquí. Tan hispanos como ellos. Como tú y como yo"
Leer másGuerra, drogas y política: elementos del mundo bipolar
El actual sistema mundial permanece unipolar en una sola dimensión: el ámbito de la fuerza. Estados Unidos gasta casi lo mismo que el resto del mundo junto en fuerza militar, y está mucho más avanzado en la tecnología de la destrucción. Está solo también en la posesión de cientos de bases militares por todo el mundo, y en la ocupación de dos países situados en cruciales regiones productoras de energéticos.
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